Kyle Kuric: "Cuando vuelva a anotar, mi gesto irá para todo el mundo"
José M. Rodríguez Calvo - Ronald Ramírez - Ignacio S. Acedo
Sábado, 19 de diciembre 2015, 13:27
A sus 26 años, el escolta del herbalife gran canaria tuvo que luchar contra un tumor cerebral. Dos meses después da una lección de superación y fortaleza, y ya piensa en regresar cuanto antes a las canchas. Eso sí, sus primeros puntos serán un agradecimiento a todos los que lo han apoyado.
- Después de todo lo que ha pasado y de los duros momentos que le han tocado vivir tanto a usted como a su familia, ¿qué tal está siendo el regreso a Gran Canaria? - Estoy muy feliz de volver. Esta Isla es mi casa. Me encanta estar aquí cerca de la playa y del equipo. Aunque todavía no puedo entrenar, el simple hecho de poder unirme a la dinámica del club, convivir con mis compañeros, es lo que realmente me motivaba para volver tan rápido. - Parece que los deportistas viven ajenos a los problemas cotidianos de la vida, pero por desgracia usted ha tenido que pasar por esta situación tan dura. Haciendo una mirada hacia atrás y repasando todo lo que le ha tocado vivir en estos últimos meses, ¿cómo fueron esas horas críticas? - En aquellos momentos si que es cierto que me lo tomé con relativa calma, toda la que se puede tener en un momento como ese. Pero sí que ahora, observando lo cerca que estuve de morir o de que algo saliera mal, pues sí que tengo una sensación de miedo o temor. Más que nada por mi familia. - ¿Ha sido un gran refuerzo las numerosas muestras de apoyo que ha recibido por parte del mundo del deporte a nivel internacional? - Una vez superada la operación, fue mi mujer la que me enseñó todos los mensajes y las muestras de cariño que estábamos recibiendo. No me lo creía, porque no solo fue el Gran Canaria o la gente de la Isla, sino que también de España, Estados Unidos o de muchos países de Europa, sobre todo a través de las redes sociales. No me pude imaginar cómo una persona tan corriente como yo pudiera tener tal repercusión. - Durante los peores momentos el Club Baloncesto Gran Canaria no lo dejó solo y numerosas personas del club se acercaron hasta Barcelona para estar con usted y con su familia. ¿Quedará eso marcado en el futuro? - Este club es algo especial. Me quedaré con un cariño inmenso hacia él. Me ha servido para comprobar como esta Isla es una auténtica familia. Berdi, Miguelo o Pedro Montesdeoca estuvieron allí, pero los compañeros y los técnicos, Aíto a la cabeza, estuvieron muy pendientes de mi, de mi esposa y de mi familia. En mi corazón queda grabado que Gran Canaria es parte mi familia. - Una vez se estabilizó su situación su discurso fue el de que quería jugar cuanto antes, pero los doctores trataron de calmarlo. Ya más tranquilamente, ¿cuándo espera regresar a las canchas? - Cuando salí del hospital era jueves y el domingo jugábamos el derbi ante el Iberostar Tenerife y lo primero que pensé era que yo quería jugar el derbi, pero los doctores y las enfermeras me intentaban calmar las ganas. Luego yo dije que en enero me veía ya en la cancha, pero el médico me dijo que hasta la temporada que viene nada. Al final, entre ambos llegamos a un acuerdo y espero que entre febrero y marzo pueda regresar. - Y a los entrenamientos, ¿cuándo espera incorporarse? - No lo sé. Yo le hice la misma pregunta al doctor, pero él me dijo que no quería darme una fecha exacta de regreso, porque eso quizás me implicaría más aún el recuperar toda la masa muscular que perdí con la operación. Aunque, tengo que tener más precaución para no lesionarme. Espero en enero estar ya con el equipo, pero primero escucharé a mi cuerpo. - ¿Cuál es la rutina que lleva ahora, tras el posoperatorio? - No mucho realmente. Esta semana, como el equipo está fuera, primero fueron a Italia y ahora a Murcia, pues aprovecho para estar con la familia y con mis hijos. En cuanto a actividades, ya empecé con la rehabilitación muscular, pero todavía no puedo hacer ejercicios muy intensos. - ¿A quién le dedicará la primera canasta cuando vuelva? - Haré mi gesto, por supuesto. Tengo a muchísimas personas a las que dedicárselo. Estoy deseando volver a jugar, seguro que será una experiencia increíble. Ojalá y esos primeros puntos que anote sirvan para ganar el partido. - Durante los días más críticos y ante la sorpresa que supuso su intervención de urgencia, sus compañeros manifestaron que no podían pensar en otra cosa que no fuera su salud, mermando incluso algunos resultados. ¿Qué sintió el día de su vuelta a la Isla cuando los visitó después de tanto tiempo sin verlos? - Fue realmente emotivo. Llegué y ellos estaban entrenándose y no me esperaba que Aíto parase el entrenamiento. Todos mis compañeros se pusieron a aplaudirme. Fue algo que me emocionó, porque no los veía desde hacía un mes por toda esta situación. Tengo muchas ganas de jugar, pero sobre todo deseo volver a formar parte de la dinámica del equipo. - ¿Qué siente cuando la gente lo para por la calle para darle ánimos y cariño? - Es algo indescriptible. Cuando voy caminando tranquilamente por la ciudad y de repente alguien me para lanzarme un mensaje de apoyo. Esta sensación ya la empecé a descubrir en Barcelona, los primeros días tras abandonar el hospital, es muy reconfortante. El sentirlo aquí también lo hace más especial si se puede. Para mí también es una oportunidad de oro para agradecérselos. Siempre que me detengo a charlar con la gente lo hago, les doy las gracias por estar ahí y por todo su cariño y su apoyo.