Escuela de escaladores en el centro de la ciudad
El club Tagorock, en el barrio capitalino de Guanarteme, ofrece la posibilidad de acercarse al mundo de la escalada a través de cursos en los que se presta especial atención a la seguridad, una cuestión que sus responsables entienden vital en una actividad de estas características.
La calle Covadonga, en el capitalino barrio de Guanarteme, acoge el rocódromo Tagorock, la apuesta de un grupo de entusiastas de la escalada por acercar esta actividad a todos aquellos que tengan interés por acercarse a una actividad de la mano de expertos en la materia.
«La idea de lo que hoy es Tagorock surgió hace unos 12 años, cuando un grupo de amigos decidimos montar un local de escalada para poder entrenar», explica Norberto Cabrera, uno de los responsables de esta novedosa apuesta. Lo que comenzó como un espacio en el que estos aficionados a la escalda daban rienda suelta a su pasión, se fue transformando en algo más, en una forma de vida. «Cambiamos de local después de ocho años y nos trasladamos a Almatriche. A raíz de estar allí comenzó la idea de enfocar el local de otra manera, no solo para nosotros, sino intentar abrirlo al público y enfocarlo a los más pequeños, sobre todo», comenta.
La idea de acercar un «deporte que no está al alcance de todo el mundo» al público más heterogéneo, hizo que este grupo de emprendedores comenzara a barajar la creación de club con el fin de fomentar la escala. «A finales de 2010 y principios de 2011 creamos un club con un objetivo claro: fomentar la escalada, dentro de un marco legal». Comenzaron a dar cursillos formativos, pero también a buscar un local más amplio que les permitiera llegar a un mayor número de personas.
Fue así como el día 8 de este mes de enero se puso en marcha Tagorock. Una idea que parece haber tenido una buena acogida, ya que hoy mismo se inician dos cursos formativos. «Uno para niños desde 8 años hasta los 10 o los 11, y otro para adultos».
El local, que se ubica en el número 20 de la calle Covadonga, dispone de todo lo necesario para adquirir nociones fundamentales para la práctica de la escalda con total seguridad. «Nadie oferta esto, una enseñanza diaria, porque la oferta que existe está más enfocada al entrenamiento y la competición».
Sin embargo Tagorock, muestra un especial interés por la seguridad. «Se olvidan de la parte de la seguridad», señala Norberto Cabrera, sin entender que resulta clave para evitar riesgos. «Cosas como identificar un material en mal estado o una maniobra mal hecha, que es lo que te puede costar la vida», asegura.
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