Elsa López vuelca en un libro su admiración por Storni
La poetisa y escritora Elsa López vuelve a la narrativa con Una gasa delante de mis ojos, una novela que gira en torno a la figura de la escritora argentina Alfonsina Storni (1892-1938). En esta obra, López se mete en la piel de la autora modernista para contar su dramática relación con una enfermedad a la que puso fin quitándose la vida.
«Desde que era muy joven, leí a Alfonsina. Me impresionó el personaje, su historia... La conocí junto a Delmira Agustini (1886 - 1914) y a Gabriela Mistral (1889- 1957)», explica la escritora y editora palmera Elsa López (Guinea Ecuatorial, 1943).
Las tres sudamericanas comparten su pasión por las letras y eran unas mujeres valientes con aspiraciones que chocaban frontalmente con la sociedad machista y conservadora que imperaba en aquella época.
Pero la figura de Storni atrapó a López. «Su suicidio me impresionó. Sobre todo porque yo era muy joven y esas cosas, a esa edad, parecen muy románticas. Leí su poesía y me pareció una mujer que reivindicaba la libertad de opinión, la sexual, el derecho de la mujer a elegir la maternidad como una opción de la mujer... Caló muy dentro de mí», comentó en conversación telefónica la escritora canaria.
Más tarde se acercó a los detalles biográficos de la escritora argentina a través de un proyecto de 13 libros en versaban sobre otras tantas mujeres de la historia. Ella eligió a Storni, pero su libro nunca llegó a publicarse porque la colección fracasó.
«Hace tres años retomé la historia, pero la rehice volviéndola a contar desde la primera persona y quitando todo lo que podía parecer académico y lo que trataba de su literatura. Al final se convirtió en una carta donde se despide del mundo», explicó la escritora y responsable de ediciones La Palma, isla donde reside desde hace varias décadas. «Me metí en la piel de esa mujer; en su desesperación y su dolor», relató López que con el libro intenta explicar por qué una mujer joven decide acabar con su vida.
MALOS TIEMPOS PARA LA LÍRICA. La supresión de la Dirección General del Libro por parte del Ejecutivo canario, primero, y recientemente por el Gobierno central es para Elsa López un signo más del desprecio institucional por la cultura.
«Cuando un señor, presidente de un Cabildo, se atreve a decir que nunca ha leído un libro, entendemos que eso sucede porque hay miles de personas que lo creen así; que los libros son innecesarios», se quejó la escritora y editora canaria especializada en la poesía. «Me dedico a la tonta entre las más tontas, que se mantiene con 300 lectores fieles y a la que nadie saca de pobre», relata con ironía acerca de la poesía, un género que sufre aún más la falta de apoyo institucional. «Los autores, librerías y editores de poesía tienen graves problemas. ¿Qué hacemos?. La poesía es el arma del futuro, saquémosla a la calle», dijo.
