El parón de El Veril evita 1.110 empleos
La suspensión cautelar de la concesión del cauce de El Veril a Loro Parque que impide la canalización del barranco previa a la construcción de un parque acuático y de un hotel evita también la contratación de 700 personas para su construcción y retrasará la de las 410 que sumarán sus plantillas.
El auto judicial que ha suspendido cautelarmente la concesión administrativa del cauce de El Veril a la empresa que quiere construir allí el mayor parque acuático de Europa y un hotel de cuatro estrellas de 220 habitaciones tiene también un coste laboral, además del económico, estimado en 700 puestos de trabajo durante la fase de construcción (dos años), 410 empleos directos una vez abiertos ambos negocios y 150 indirectos.
La entidad Loro Parque explica en la documentación que incluirá en el recurso de apelación contra el citado auto, para su revisión por parte del Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC), que la construcción del parque acuático y del hotel supondría la contratación de 500 y 200 trabajadores, respectivamente, durante dos años. No obstante, no coincidirían en el tiempo, dado que el inicio de las obras del hotel no sería posible hasta que las del parque acuático estén ejecutadas al 50 %.
Durante la posterior explotación de las instalaciones, la empresa del Grupo Kiessling contrataría a 300 trabajadores para el parque acuático y a otras 110 personas en el hotel, lo que suma 410 empleos directos entre las dos plantillas.
Asimismo, el informe económico de Loro Parque que se opone a la suspensión cautelar cifra en 150 los empleos indirectos que se generarían.
El coste laboral se añade a los perjuicios económicos directos a la empresa, estimados en 27,58 millones de euros de daño emergente, así como en un lucro cesante anual de 14,56 millones. Para las arcas públicos los daños se calculan en 19,68 millones por la no construcción de ambos negocios y en 6,56 millones por año que no estén abiertos.
