Dudar no está permitido
Las Palmas tiene una gran oportunidad (19.00 horas, Televisión Canaria) para hacer que la frustración del Rodríguez López parezca un accidente. Ganar al Sporting, cuarto, aspirante e invicto, prestigiaría el liderato del equipo de Herrera y sepultaría el desliz ante el eterno rival con poca trascendencia en los albores del otoño.
Las expectativas en el equipo no se ha rebajado. Las Palmas sigue comandando una clasificación tan anecdótica como esperanzadora a comienzos de octubre. Por eso hace bien Paco Herrera en no deshacer, a pesar del alta de Culio, el molde por un mal partido, pues una revolución en el once tras la primera derrota transmitiría inestabilidad y desconfianza. Valores injustos tras una arranque de temporada casi perfecto.
Con el recuerdo del derbi aún latente, Las Palmas necesita recuperar su identidad ante un rival directo. Pues el resultado, que aún escuece, no fue lo peor de Tenerife. Por eso hoy, frente a un rival fetiche, aún invicto y con idénticas aspiraciones, el equipo de Paco Herrera debe demostrar que un mal día lo tiene cualquiera. Incluso el líder.
A solo un punto llega el Sporting de Abelardo. Un rival con estadísticas históricas en contra en el Gran Canaria, pero con el pasado reciente como acicate y la intención de descabalgar al conjunto grancanario de lo más alto a las primeras de cambio. Con peor plantilla a la que se le ganó en la promoción hace unos meses, este Sporting parece mejor equipo que aquel. Más eficaz, solidario y peligroso a domicilio. Por eso la trascendencia del partido para Las Palmas. No por la defensa del liderato, sino por la confirmación de un modelo.
- Alineaciones probables:
UD Las Palmas: Raúl Lizoain; David Simón, David García, Aythami Artiles, Ángel López; Hernán, Javi Castellano, Vicente Gómez; Nauzet Alemán, Araujo, Momo.
Sporting: Cuéllar; Lora, Luis Hernández, Bernardo, Álex Menéndez, Sergio Álvarez, Nacho Cases, Juan Muñiz, Alex Barrera, Jony, Guerrero.
Árbitro: Jorge Valdés Aller (Comité Castellano-Leonés).
Estadio: Gran Canaria.