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CANARIAS7 conmemora y celebra en estos días el 30 aniversario de su aparición, aquel 2 de octubre de 1982 en que muchísimos grancanarios acogimos con enorme ilusión la llegada de un nuevo periódico, de un rotativo que ha cubierto fecundamente no sólo sus expectativas, sino las de amplios sectores ciudadanos e institucionales que en aquellos años, en los que se abrían tantas y nuevas expectativas, en los que a la sociedad canaria se le planteaban retos novedosos y casi insospechados hasta ese momento, estaban convencidos de la necesidad ineludible de contar con un nuevo medio que trajera aires diferentes al periodismo isleño, una manera actualizada de afrontar la información en un tiempo y un entorno que también era nuevo y que cambiaba a una velocidad que pocos años antes hubiera sido concebida como de vértigo, tal como, desde unos pocos años antes, se venía mascullando, debatiendo, reflexionando en reuniones y tertulias en las que se aspiraba a la fundación de un nuevo periódico que fuera un verdadero revulsivo para el panorama del periodismo isleño existente hasta entonces, y recuerdo algunas como las que se mantuvieron, de forma notoria, en el histórico Café Madrid de la Plazoleta de Cairasco.
CANARIAS7 venía a este mundo justo 130 años después del nacimiento del primer periódico que de forma notoria impulsó el periodismo y su influjo en el seno de la sociedad grancanaria, El Porvenir de Canarias, que había salido a la calle el 10 de octubre de 1852, el mismo día en que entraba en vigor el famoso Real Decreto de Bravo Murillo por el que se creaban los Puertos Francos que tanto porvenir traerían a las 7 islas, un porvenir por cuya defensa ha apostado también CANARIAS7 como elemento vertebrador de su trabajo periodístico desarrollado a lo largo de las dos últimas décadas del siglo XX y las que ya llevamos recorridas del actual. Aquel periódico, que tuvo entre sus redactores a Antonio López Botas ó a Agustín Millares Torres, y se imprimió hasta el número 8 en el taller tipográfico de Ortega y Hermanos y luego en el que tenía en la Plaza de Santa Ana nº 8 D.F.M. Guerra, celebraba la «nueva organización administrativa dada a la Provincia por el Real Decreto de 17 de marzo de este año, la franquicia de sus puertos concedidas por el otro Real Decreto de 11 de julio», y resaltaba cómo «tras largos años de indiferencia y olvido, de sufrimiento y desgracias, las Islas Canarias serán consideradas de hoy mas cual a su situación e importancia merecen, y de que obtendrán a la vuelta de pocos años un engrandecimiento tal que reconquisten y puedan llevar con verdad el renombre de Afortunadas». Un mes de octubre de ciento treinta años después, en un ámbito político, económico, social y cultural que contemplaba al futuro con enormes esperanzas y bastantes inquietudes, pues tras la aprobación de una nueva constitución, las expectativas que abría el proceso autonómico, las miradas puestas en una Europa cada vez más cercana, la revitalización del papel tricontinental del Archipiélago, surgía un nuevo periódico, a la voz de ya estamos aquí, que nos recordaba aquellas mismas ilusiones de modernización y progreso que contagió a nuestros antepasados la aparición de aquel primer periódico consolidado en Gran Canaria. Con ello no sólo percibimos que la historia del periodismo canario consolida un devenir de gran interés, sino que se resalta como CANARIAS7 ha estado 30 años al servicio del porvenir de Canarias.
Dentro del conjunto de innovaciones periodísticas y tecnológicas que se presentan hoy como hitos en el camino de CANARIAS7 aparece su trabajo como impresor de periódicos foráneos, como es el caso del rotativo alemán Bild en 1994. Una iniciativa importante en el camino de progreso del periodismo insular que conectaba también con el mismísimo primer gesto del periodismo en la Gran Canaria en enero de 1809, cuando en la imprenta de la Real Sociedad Económica de Amigos del País en ese momento dirigida por José de Viera y Clavijo, a quién se debe en buena medida la introducción del interés por el periodismo en las islas- se reimprimió el número 1 del Correo Político y Militar de la Ciudad de Córdoba, buscando saciar con ello las enormes apetencias que existían de noticias sobre la Guerra de la Independencia y su evolución, especialmente tras los ecos tardíos que aquí llegaban de la Batalla de Bailén, acaecida el mes de julio anterior. CANARIAS7 que desde su comienzo fue exponente de innovación, de cambios pioneros, que luego fueron asumiendo otros medios canarios, simboliza también todo lo que supusieron para la sociedad grancanaria los comienzos y el desarrollo de la historia del periodismo en esta isla.
CANARIAS7, superando las duras pruebas a las que somete todo comienzo, capaz de introducir el color en 1985, una novedad que era imprescindible en el seno de una sociedad ya muy diferente en su conformación cultural y en sus expectativas, y pese a las dificultades para continuar que le vaticinaron algunos pesimistas, se mantuvo y alcanzó pronto una madurez plena en el periodismo canario, al tiempo que su prestigio traspasaba las fronteras isleñas. Nacía con un tiempo nuevo y cambiante, se desarrollaban al unísono que lo hacía una nueva sociedad insular, y se asentaba sin discusión alguna el parnaso del debate por el porvenir de Canarias, pues como ya había señalado otro periódico grancanario de 1853, El Despertador Canario, en «el estado actual de los pueblos, las publicaciones periódicas son una condición necesaria de la vida social»; CANARIAS7 ha mostrado la realidad ineludible de esta afirmación en estos 30 años, y estamos convencidos que lo seguirá haciendo en el futuro que ha contribuido a abrir de par en par.
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