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Turismo de Islas Canarias acudirá a la Feria Internacional de Turismo de Madrid 2025 (Fitur), que se celebra entre los días 22 y 26 de enero tras cerrar un 2024 en el que ha superado todas las expectativas y con la intención de volver a posicionarse como el destino turístico líder a nivel nacional y «seguir promocionando a las islas como un destino seguro», poniendo en valor las bondades de Canarias y buscando «atraer al turista que respeta el territorio» y que no sea ajeno a los «retos que tenemos en el destino», expresó la consejera de Turismo del Gobierno de Canarias, Jessica de León.
Asimismo, anunció que Canarias aterrizará en Fitur tras haber batido en 2024 su récord de facturación con un gasto medio por turista en destino de 1.416 euros, un 26% más que los 1.123 euros de 2019, antes de la pandemia. «Nuestro objetivo en Fitur es conectar con un viajero que valore nuestro medio ambiente y cultura, que priorice la experiencia y distribuya el gasto con el fin de beneficiar a la sociedad canaria».
Los turistas que visitaron las islas el año pasado gastaron un 24% más en compras en supermercados, un 27% más en alojamiento, un 34% más en transporte público, un 39% más en los pasajes entre islas, y un 64% más en alquiler de vehículos.
Además, el gasto en restauración aumentó un 46%, con las actividades lúdicas y experiencias creciendo un 43%, destacando los parques de ocio (83%) y las actividades relacionadas con la salud (78%).
La titular del área de Turismo indicó que el precio de los billetes de avión se incrementó en un 20% de media, sin afectar en demasía al turista, ya que este ámbito supuso el 28% del total del gasto del viaje, mientras que el 72% restante se produjo en el destino, sobre todo en alojamiento.
Todo este aumento en los gastos hizo que Canarias tuviese, a falta de los datos de diciembre una facturación de 24.000 millones de euros en 2024, incluyendo el turismo interno, 2.000 millones más que el año pasado. Además, el turismo volvió a ser clave como generador de empleo, ya que las actividades vinculadas al mismo aumentaron un 5,3%hasta noviembre, por encima del total regional, que fue del 3,9% y del nacional, que se quedó ligeramente por debajo del 3%.
De León resaltó que todas las islas experimentaron una evolución positiva durante el pasado curso, en particular La Palma, que fue la que más mejoró sus cifras respecto a 2023. Pese a estar todavía por debajo de los valores de 2019, la consejera aseguró «estar convencida» de que la reciente reapertura de Puerto Naos supondrá el «impulso definitivo» para la buena marcha del turismo en la isla.
Al mismo tiempo, apuntó que la mayoría de los mercados emisores tuvieron evoluciones favorables. Al ya habitual crecimiento del mercado británico se le sumó un impulso del turismo italiano y francés con un 68%y 55,7% de subida respectivamente. El conjunto del resto de países también tuvo un crecimiento del 32,5% gracias a la apertura de nuevas rutas con los países bálticos y Estados Unidos.
Turismo de Canarias presentará la semana que viene en Fitur un nuevo estand que estará operativo durante los próximos dos años, dando «continuidad» al estand anterior en la lucha por seguir reduciendo la huella de carbono. Esta nueva plataforma contará con 1.768 m2 de espacio, 223 m2 más, aumentando la reutilización de materiales al 90%. El gerente de Turismo de Islas Canarias, José Juan Lorenzo aclaró que este estand es el mismo que se va a desplazar a la World Travel Market de Londres, a la ITB de Berlín y a todo el resto de ferias y eventos a los que se acudirá durante 2025.
Lorenzo explicó que el diseño está «cuidadosamente concebido» para recrear la esencia de las ocho islas, tanto de su orografía como de su clima.
Asimismo, la Consejería estará acompañada de 375 empresas canarias, 23 más que en 2024 y 1.315 agentes del sector turístico, 143 más que el año pasado.
La consejera de Turismo del Gobierno de Canarias afirmó tajantemente que es una «falacia» que la aplicación de una ecotasa vaya a suponer que se presten mejores servicios para los canarios, recalcando que todas las administraciones de Canarias ya cuentan con un superávit en sus cuentas, del que no pueden hacer uso debido al techo de gasto vigente. «Ese dinero termina en los bancos generando una serie de gastos asociados al mantenimiento de esas cuentas», expresó la consejera.
En la misma línea, comentó que por su figura tributaria, la ecotasa sería una tasa que también tendrían que sufragar los residentes canarios, de los que asegura, «no están interesados».
De León mencionó que el objetivo es empezar a transicionar hacia el modelo que se practica en Lanzarote ya que mientras la tasa solo permite cubrir la totalidad del servicio que presta y no puede ir más allá, los precios públicos, modalidad que se usa en Lanzarote sí permite una mayor recaudación.
Aclara que esta figura no solo ayuda para fomentar la creación de empleo, sino también para «generar un producto turístico» y a raíz de esa experiencia, crear una economía indirecta de la que se puedan beneficiar pymes y autónomos que viven de esos espacios naturales.
Recordó que desde su consejería siempre han defendido «una fiscalidad inteligente» que permita que esa recaudación se pueda revertir en la conservación del espacio y en la creación de empleo. «Tenemos que implicar a los cabildos y agradezco el trabajo de Tenerife y Gran Canaria que están impulsando el control de los flujos y la imposición de tasas para acceder a esos espacios naturales».
Volviendo a realizar una comparación entre el modelo que se aplica en Lanzarote y el que muchos colectivos pretenden aplicar con la ecotasa, aseguró que con el modelo que se pretende implantar, Canarias podría recaudar más del doble que con una hipotética tasa turística. Mientras que con la ecotasa, la estimación era una recaudación que girara en torno a los 200 millones, De León afirma que si se tiene en cuenta los 60 millones de euros que Lanzarote obtiene, Canarias podría obtener 420 millones de euros, al contar todas las islas con espacios naturales protegidos y «un espacio turístico por el que cobrar para acceder».
Por último, señaló que una de las principales tareas en este aspecto «es definir la capacidad de carga de los espacios naturales protegidos», algo que ya tendría que estar definido en «los planes rectores de uso y gestión de cada espacio natural que dicen la capacidad de carga que soporta el espacio para no estar degradado» y a partir de ahí hacer el cálculo de lo que cuesta y dotarlos de agentes de medioambiente que puedan imponer sanciones para los turistas que no respeten las normas del parque. «Todo está inventado, en Canarias lo único que tenemos que hacer es aplicarlo», puntualizó.
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