Las agencias de viajes prevén alcanzar en verano el 40% de las ventas de 2019

Las agencias de viajes esperan iniciar la reactivación del turismo a partir de junio y alcanzar este verano el 40% de las ventas que obtuvieron en la temporada estival de 2019, antes de la llegada de la covid, para lo que piden que se transmita «confianza y seguridad» al consumidor y se unifiquen criterios en la UE.

Así lo ha explicado el director de la Asociación Corporativa de Agencias de Viajes Especializadas (Acave), Martí Sarrate, durante la presentación de una encuesta sobre el estado de las agencias tras un año de pandemia, en el que han cerrado definitivamente un 20% de las mismas.

«Si todo fluye con normalidad, creemos que la recuperación puede ser a partir de junio», ha dicho Sarrate, para quien alcanzar un 4% de las ventas que se hicieron en 2019 sería «bastante bueno para el sector», ya que en 2020 las ventas cayeron un 90 %.

Según Sarrate, las perspectivas para Semana Santa son prácticamente «nulas», pese a que se han reactivado algunos vuelos a Canarias y Baleares, donde podría aumentar la actividad un 30%.

Sin embargo, un 63% de las agencias no prevé la recuperación hasta la temporada 2022, mientras que un 34% la sitúa a partir del próximo verano.

Según el informe de Acave, el 20% de las agencias de viaje españolas siguen cerradas desde el inicio de la pandemia en marzo de 2020 y sin facturar nada desde entonces, y solo el 10% han podido abrir todas las oficinas.

Además, un 36% de los negocios creen que se encuentran en riesgo de cierre definitivo a lo largo de este año ya que, prácticamente el 76% de las agencias facturaron en 2020 entre el 90 y el 95 % menos que el año anterior.

Entre las medidas que reclaman para intentar superar esta situación se encuentra la extensión de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) hasta que se retome la plena actividad turística.

También han pedido ayudas directas a las empresas «que no acaban de llegar» y, según Sarrate, están pendientes de ver cómo se concretan las ayudas anunciadas por el Gobierno, aunque no están de acuerdo en que se tenga en cuenta el periodo entre marzo de 2020 y 31 de mayo de este año, porque en esa fecha aún no se habrá recuperado la actividad.

Serrate ha propuesto que, independientemente de que se siga con la vacunación, se hagan test de antígenos a los viajeros y que se unifiquen los criterios y protocolos tanto dentro de las autonomías como en la UE, además de ver con optimismo la llegada del pasaporte sanitario europeo.

También ha reclamado la reactivación de los cruceros, donde el 95% de las compras se hacen a través de las agencias de viaje, la creación de un bono de vacaciones para que la gente pueda viajar por España, la rebaja del IVA, moratorias de los ICO y que se exima de pagar ciertas cantidades de los mismos.

El sector también considera necesaria la realización de una campaña de fomento del turismo para transmitir confianza al consumidor, a la vez que pide una reactivación de los vuelos.

Sarrate no cree que la reactivación de los viajes del Imserso se produzca en septiembre, porque hay que hacer un nuevo concurso y cambiar la normativa y considera que este programa no estará en marcha este año.

El sector tiene claro que poner en marcha ferias como el Mobile o Fitur servirá para dar una «imagen publicitaria a nivel internacional muy potente», ya que en el extranjero se podrá ver que el país está preparado para realizar este tipo de actos.

Los proveedores de las agencias de viajes, principalmente las aerolíneas, siguen debiendo casi 150 millones de euros, pese a que ya han devuelto unos 200 millones.

Sin embargo, el incumplimiento de las compañías aéreas y, en menor medida, de otros proveedores ha provocado que el 50% de las agencias se hayan visto obligadas a solicitar líneas de crédito para seguir a flote y un 20 % afirma que los impagos les han puesto en una situación límite.

Además, se acerca la fecha impuesta por el Gobierno para reembolsar a los clientes los bonos de viajes que tenían contratados y que no pudieron disfrutar y cuyo periodo de validez no se puede ampliar, por lo que el 90 % de las agencias creen que sus clientes preferirán una restitución en metálico del importe contratado y que apenas un 8% lo canjearán por otro viaje.