El sector primario canario se refuerza con mujeres cada vez más formadas

El titular del departamento destacó que este estudio avanza algo interesante y positivo, y es que, según apunta, «se está produciendo un cierto relevo generacional femenino que va acompañado de una mayor formación y profesionalización del sector». Este también experimenta una progresiva modernización y diversificación de sus producciones (además de queso se elaboran otros lácteos y se desarrollan actividades complementarias a la producción quesera) pese a que no pierde su marcado carácter artesanal.

«Debemos trabajar para impulsar el número de mujeres titulares de explotaciones y queserías y en la visibilización de referentes profesionales femeninos que atraigan a nuevas generaciones y en romper con los clichés y estereotipos en el sector primario, a través de iniciativas como esta, en la que hoy participamos, así como en dignificar el trabajo en el sector primario y a sus profesionales», añadió.

El estudio está elaborado por Anabel Calderín y Ana Morales y es iniciativa de la Cátedra de Agroturismo y Enoturismo del Instituto Canario de Calidad Agroalimentaria (ICCA) de la Universidad de La Laguna. Calderín indicó que la investigación tuvo una duración de 18 meses y cuenta la narrativa de mujeres queseras canarias, con un objetivo académico y testimonios reales de mujeres. Una de las principales conclusiones que se derivan de la investigación es que «estamos aproximándonos a una mayor profesionalización de la mujer en el medio rural, con una mayor visibilización y la incorporación de mujeres jóvenes». De las trabajadoras entrevistadas, la edad media fue de 48 años, siendo el 75% de ellas madres para las que hay que buscar «estrategias de conciliación de su vida familiar y social para que puedan combinar su actividad en el sector con la maternidad».

Calderín destacó que «está empezando a visibilizarse» un relevo generacional «cada vez más preparado. Las mujeres que hemos entrevistado asumen ese relevo generacional» pero es clave «generar estrategias para que las mujeres sigan apostando por el sector primario. Hay que encontrar la manera de hacerlo atractivo» para que no solo lo hagan por herencia de una figura masculina, sino por que les interese. Calderín añadió que es importante que el Estado «apueste por formaciones en el ámbito rural, no solo a través de premios y concursos», concluyó.

Alba, trabajadora de la granja La niña de las Gavias, citó el forraje como el principal problema que comparten ahora mismo muchas ganaderas, aduciendo que las subvenciones que están dando actualmente las administraciones «no me resuelven en nada». Alba se queja de que estas ayudas, dadas «a diestro y siniestro» a los profesionales del sector no son el método adecuado para acabar con el problema del forraje. «Ayudarían más si dedicaran todo ese dinero a subvencionar una parte del forraje, que yo cuando yo vaya a una cooperativa a comprar pienso o forraje pueda tener un descuento sobre el precio que estoy pagando ahora».

Además, recalcó que esa solución sería más beneficiosa a «largo plazo» ya que con el actual modelo de subvenciones «puedo escapar un mes pero los animales están a mi cuidado los 365 días del año y comen todos los días».