Los hoteles canarios logran el 45% de ocupación en julio tras la reapertura de las fronteras

Los empresarios turísticos consultados confirmaron ayer que en torno al 40% de la oferta hotelera ha vuelto a abrir sus puertas este mes, lo que significa que más de 210 establecimientos están atendiendo ya a clientes.

Un paso de gigante hacia la recuperación teniendo en cuenta que en junio solo abrieron 49 hoteles en toda Canarias.

Además, la ocupación de estos alojamientos que vuelven a recibir turistas se sitúa «entre el 45% y el 50% de media», según estas mismas fuentes. Se está notando sobre todo la reactivación de conexiones aéreas con los principales mercados emisores de turistas -la península española, Reino Unido y Alemania-, lo que ha permitido que comience a volver parte del turismo perdido». Pero igual de importante ha sido en esta primera fase la «buena respuesta de los propios residentes en las islas».

Tampoco es que se puedan tirar voladores: un 50% de ocupación en una oferta alojativa que a duras penas llega todavía a la mitad de su capacidad lo que significa que solo se ha recuperado un cuarto de los niveles de actividad turística que se registraban hace un año. El salto del destino canario en solo un mes ha sido monumental, pero se partía prácticamente de la nada turística debido a las restricciones aéreas internacionales.

«Tendremos un verano mucho mejor de lo que podíamos pensar. Estamos notando bastante demanda vacacional, y aunque tenemos la dificultad de que están abriéndose todavía las conexiones aéreas, objetivamente hay mucho interés en el destino canario», reconoce el presidente de la Comisión de Turismo de la Cámara de Comercio de Gran Canaria, Santiago de Armas. El también consejero del grupo Lopesan y presidente de IFA Hotels considera las claves que, a su juicio, están propiciando esta recuperación «más rápida de lo que se preveía»: «El impacto de la pandemia de la covid fue mucho menor en el archipiélago y la situación ha sido muy bien gestionada, lo que ha generado confianza internacional, nacional y local en el destino». «Los hoteles que están abiertos están a unos niveles de ocupación de entre el 45% y el 50% de su capacidad, y muchos porque se han autolimitado marcando un 60% máximo para aplicar con solvencia los protocolos anticovid.

Gracias al aumento de la ocupación prevista, en agosto se habrá recuperado más del 50% de la oferta hotelera canaria, y las ocupaciones podrán mantenerse en el entorno de ese 60% de ocupación, suficiente para garantizar un mínimo de viabilidad económica», vaticina De Armas.

Pero el sector hotelero reconoce que se mantiene la incertidumbres sobre la evolución del turismo tras los meses estivales. «A partir de septiembre se prevé que comenzarán a notarse realmente las consecuencias económicas de la pandemia, y puede que entonces se acabe también este boom de las ganas de viajar tras tanto tiempo de encierro, algo que posiblemente afectará a todos los mercados, incluidos los internacionales».

«Tenemos que ser realistas, y el riesgo internacional de brotes es enorme. La capacidad de contener la pandemia en los países emisores marcará el éxito de la temporada de invierno en las islas», advierte. Los hoteleros insisten en que para minimizar los riesgos, deberían realizarse pruebas diagnósticas de la covid-19 en los aeropuertos canarios a la llegada de los turistas, una medida sanitaria de prevención que defiende el Gobierno canario pero que no tiene el visto bueno del Ejecutivo central.

es la cifra aproximada de hoteles -el 40% de la oferta total- que ya han reabierto sus puertas en Canarias en este mes de julio, según los cálculos de los empresarios turísticos. Un aumento significativo respecto a los 49 alojamientos que había disponibles en mayo.