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Manu Alvarez
Miércoles, 26 de abril 2023, 07:54
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Iberdrola ha desbordado todas las previsiones que se habían hecho hasta ahora en torno a sus resultados trimestrales al conseguir un beneficio neto de 1.485,4 millones de euros en el primer trimestre del año. Una cifra que supone un aumento de nada menos que el 40% en comparación con el mismo periodo del año anterior y que se produce pese a haber tenido que contabilizar ya el nuevo impuesto aprobado por el Gobierno de Pedro Sánchez para las empresas energéticas, que supone un impacto de 200 millones de euros en las cuentas de la eléctrica.
La compañía ha asegurado que buena parte de este aumento del beneficio se debe a la entrada en funcionamiento de muchas inversiones que se han realizado en los últimos años, pese a que se ha registrado un descenso generalizado de la demanda de electricidad en casi todos los mercados en los que opera. Así, el descenso en España ha sido del 2,7%, del 3,8% en Reino Unido y del 5,2% en Estados Unidos. Tan solo en Brasil se ha contabilizado un ligero incremento del 0,2%. Iberdrola, sin embargo, ha salido favorecida este primer trimestre del año por la mayor producción de sus centrales hidroeléctricas, eólicas y solares, que han compensado el descenso del recurso al gas en las de ciclo combinado. Con todo, la facturación global de la empresa ha ascendido en estos tres meses a 15.460 millones de euros, lo que representa un 27% más que en el mismo periodo del año anterior.
En torno al plan de inversiones, Iberdrola ha informado que en el último año ha materializado unas inversiones de 10.400 millones de euros en este trimestre, lo que supone un avance del 9% sobre el pasado ejercicio. El 91% de la inversión se ha destinado a renovables -4.600 millones de euros, de los que un 30% correspondió a eólica marina- y a redes inteligentes -4.800 millones- «para acelerar la electrificación y fomentar la autonomía energética», han indicado.
Los resultados de la empresa no recogen todavía el impacto contable de la venta de una parte de sus centrales de generación en México, tras el acuerdo alcanzado con el Gobierno de ese país, que le permitirá ingresar 5.500 millones de euros. Pese a ello, Iberdrola se mantendrá en México con un 40% de la capacidad de generación que tenía hasta ahora, centrada en tecnologías renovables, además de poder aspirar a la construcción de nuevos parques en el futuro
La deuda financiera neta –la deuda total de la empresa menos la liquidez de que dispone- se mantiene ligeramente por encima de los 44.000 millones de euros, una cifra que iguala prácticamente la del cierre del primer trimestre de 2022. Por otra parte, la eléctrica vasca cuenta en la actualidad con 40.920 empleados en todo el mundo, tras incrementar en 1.200 el número de empleos directos en los últimos doce meses.
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