El adelanto de la apertura de las fronteras obliga a Canarias a trabajar “contrarreloj”.

"Seguimos apostando por los test en origen prioritariamente y vamos a luchar hasta el final", ha comentado, pero en caso de que no haya luz verde se trabaja en un "plan alternativo" para acometer los test en las islas, con un coste aproximado de unos 40 millones de euros para 2020.

La consejera ha insistido en que se está negociando "como se haría" pues el Estatuto de Autonomía les da "posibilidades" para ejercer esa competencia, especialmente cuando empiecen el "pico fuerte" de la llegada de turistas, dado que a partir del día 21 los flujos serán más pequeños y se pueden controlar con más facilidad.

A partir de ahí, ha comentado que hay que estudiar "como se puede financiar" para que el dinero "no salga solo de las arcas públicas".

Castilla ha destacado que hay que "evitar" que vuelva a producirse un episodio como el del viaje a Lanzarote con un caso positivo y al mismo tiempo "proteger" a la población canaria y a los trabajadores del subsector turístico.

TEST "PARA TODOS", TAMBIÉN PARA TURISTAS NACIONALES

En esa línea, ha apuntado que quieren "test para todos", también para los turistas nacionales e incluso para los canarios que viajen con frecuencia a la Península o algún país europeo porque no se sabe qué han hecho y con quienes han estado. "Hay que evaluarlos", ha agregado.

Con todo, ha comentado que Canarias estará prácticamente preparada para recibir a turistas internacionales el día 21 y el 1 de julio "estará todo perfecto", y aunque ve una "debilidad" la falta de tiempo y financiación, cree España da una "señal de fortaleza" enviando el mensaje al mundo de que está lista para iniciar la campaña turística.

Castilla ha comentado también que la comunicación con el Estado "es fluida" y se le ha hecho ver que los "pilares estructurales" para reactivar el turismo en Canarias pasan por prorrogar los ERTE en el turismo, más las actividades vinculadas, y buscar financiación para impulsar el mercado de compañías aéreas y recuperar la conectividad con el archipiélago.

"Hay que levantar un cero turístico y ayudar a empresas y autónomos", ha indicado, por lo que espera que Canarias salga bien parada en el plan nacional de turismo.