Javi Muñoz y el trabajo en la sombra

Ha salido de inicio en nueve ocasiones, completando seis de ellos. Solo cuatro ha partido desde el banquillo para dar aire fresco al equipo. Con un total de 810 minutos sobre el verde, el 5 amarillo ha influido mucho en el juego colectivo, incluso sumando en varios de los últimos goles.

Recordemos aquel gol de Moleiro en la última cita amarilla como distrajo al defensa arrastrándolo hacia afuera para que el 10 tuviera un golpeo limpio ante Osasuna. O teniendo influencia directo en las dos dianas frente al Atlético de Madrid. El de Parla dejó pasar la pelota para que Kirian, en posición ventajosa, batiera a Oblak por abajo. Y en el segundo, también el de Parla, robó el esférico en el centro del campo en una mala salida de los colchoneros, arrastrando al defensor que le salía al corte para que Benito se quedase mano a mano con el meta esloveno.

Y es que Javi Muñoz se ha convertido en una pieza vital para esta UD, se ha ganado el sitio en medio del campo, por delante de Enzo Loiodice, un indiscutible bajo el mandato del catalán pero que quizá ahora no esté pasando por su mejor momento y, claro está que, la falta de minutos no le ayuda. Su rendimiento en cada encuentro, en cada balón dividido y con el ímpetu que le imprime el bueno de Javi, justifica la apuesta de Pimienta.

Al principio, fue cuestionado por su llegada al club de manera gratuita por el Eibar, pero a día de hoy, son pocos los que pueden reprochar el trabajo del 5, que se afianza en el once titular como pieza fundamental de un equipo que se encuentra octavo en la tabla con 18 puntos. Trabaja tanto en ataque como en defensa, quizá solo le falte el gol para terminar de recibir los elogios que se está ganando por mérito propio.

Con Muñoz en el trío centrocampista que acostumbra Pimienta en su sistema, a la UD no le falta clase, consistencia ni piernas, porque tal y como se caracterizó en pretemporada, es un jugador de «idas y venidas». Ya en los encuentros de pretemporada él fue el máximo anotador del equipo y, ahora mismo, es un fijo.