Bolt hubiera ganado en alpargatas

Baker, Kerley, Su, Sibane, Jacobs, Kerley… se irán aproximando a los récords del jamaicano. Decía Bolt que si él se hubiera calzado estas zapatillas de fibra de carbono hubiera corrido los cien metros en 40 zancadas. Todo en menos de nueve segundos. Jesse Owens (Campeón Olímpico en Berlín'36) nunca se quejó de sus zapatillas, ni siquiera de correr en pistas de tierra. Innovación, Sr. Bolt. Visto lo que he visto y sin menospreciar a nadie, ayer el jamaicano hubiera ganado con alpargatas.

Tras la descalificación del británico Hughes por una salida nula, siete atletas a por el oro en una final que ya se presumía como muy abierta. TIC-TAC. 200 pulsaciones. Los primeros veinte metros no levantan cabeza y ni respiran. Kerley se adelanta. Todo está muy igualado pero Jacobs viniendo desde atrás progresa, es como un Bolt con menos galones, se va solo. Los demás le miran de reojo como queriéndole decir 'y tú de qué vas, ni eres yanqui ni jamaicano, te vas a hundir'. Jacobs estuvo excelente, paró el cronómetro en 9»80, nuevo récord de Europa. Pero siempre hay un pero: sus rivales estuvieron muy por debajo de una final olímpica.

No pretendo comparar esta final con las que vimos ganar al jamaicano, pero de las cuatro últimas citas olímpicas, esta ha sido la más descafeinada. Estamos ante un cambio generacional, diamantes sin pulir que no brillaron como en su día Owens, Lewis y Bolt.