Ocho canarios en la historia de los Mundiales

Pedro Arico Suárez fue el pionero de toda esta camada. Aunque nació en Santa Brígida en 1908, tanto él como su familia emigraron a Argentina en busca de un futuro mejor, siguiendo miméticamente el guion de miles de emigrantes isleños que probaron fortuna en América. Dado que su llegada a tierras pamperas fue con apenas dos años, el satauteño adquirió como es lógico la picardía y el estilo de ese fútbol que se destilaba en las calles de Cafferata, al sur de la Provincia de Santa Fé.

Muy pronto pasó de Ferro Carril Oeste a Boca Juniors, club en el que se convirtió en toda una institución. Más de 300 encuentros y cinco campeonatos. Solo un gol en todo ese tiempo, pero era evidente que su labor se capitalizaba en la retaguardia.

Hasta tal punto llegó su voracidad por competir y su capacidad por anular el juego del rival que terminó siendo convocado para el Mundial de 1930, el primero de la historia, donde acabó subcampeón. Defendió la camiseta albiceleste en 11 ocasiones -una cifra respetable para aquellos tiempos en los que no habían apenas clasificaciones y amistosos-. Se retiró a los 34 años siendo el capitán.

Se da la curiosa imagen en Brasil 1950 donde tres canarios llegaron a coincidir en una prodigiosa selección, con Zarra como gran referente, que alcanzó el cuarto puesto de la clasificación, siendo la mejor posición alcanzada por el combinado ibérico hasta 2010.

Luis Molowny Arbelo -Puerto de la Cruz (1925) -Las Palmas de Gran Canaria (2010)- fue uno de ellos. De ascendencia irlandesa, defendió los colores del Real Madrid durante una larga dinastía del conjunto blanco, además de los colores de la selección. Posteriormente se convertiría en entrenador tanto de la UD Las Palmas como del Real Madrid y de la propia selección, terminando su trayectoria en el universo del fútbol como director deportivo en Concha Espina. ​Con la elástica nacional disputó 7 partidos y marcó un tanto.

Alfonso Silva -Las Palmas de Gran Canaria (1926) -Constanza (2007)- es otro de los grandes referentes del fútbol isleño, después de que militara tanto en el Atlético de Madrid (1946-55) como en la UD Las Palmas (55-59), defendiendo a su vez los colores de España en cinco ocasiones, firmando también un gol.

Junto a ellos dos, RosendoHernández -Santa Cruz de La Palma (1921-2006)- estaría también presente en la cita brasileña de 1950. Como fino centrocampista, el palmerocomenzó su carrera en el Tenisca y el Mensajero, los dos clubes referentes de la isla bonita. Posteriormente recalaría en la Cultural Leonesa y terminaría defendiendo los colores del Atlético de Madrid. En total disputó cuatro partidos con La Roja.

Tras esa mítica Copa del Mundo en tierras sudamericanas, el vacío entre décadas se hace ostensible. Entre la presencia de AntonioBetancort -Las Palmas de Gran Canaria (1937-2015)- en Inglaterra 66 y la de Juan Carlos Valerón en Corea-Japón 2002 se produce un salto de hasta 36 años.

Y eso que lo del portero del Real Madrid, Deportivo y Las Palmas fueron dos partidos como internacional. Llegó a ser convocado con la selección para el torneo mundialista celebrado en las Islas Británicas, pero no llegó a disputar ningún partido. Sin embargo, su valía estaba más que probada, ejemplificándose en la consecución de un Copa de Europa de 1966 con el conjunto blanco.

Por su parte, Valerón (Arguineguín, 1975) elevó un peldaño más el axioma universal del buen fútbol isleño (46 partidos y 5 goles con la camiseta internacional). Con una excelente visión de juego y un impecable toque en la medular, disputó la cita en tierras orientales donde el combinado dirigido entonces por José Antonio Camacho se quedó a las puertas de las semifinales tras unos camaleónicos cuartos frente a la anfitriona Corea del Sur.

A partir de Valerón hubo un nuevo punto de inflexión. Varios jugadores del Archipiélago volvían a coquetear con la selección hasta que PedroRodríguez y DavidVilla se consolidarían en las últimas grandes citas mundialistas, coronándose ambos en la más que recordada Copa de Sudáfrica 2010.

Producto forjado en la mismísima Masía, Rodríguez (Santa Cruz de Tenerife, 1987) consolidó gran parte de su carrera futbolística en el Barcelona, antes de pasar al Chelsea donde sigue desarrollando su juego de desequilibrio entre la delantera y las bandas. Un gran extremo que en la selección ha dejado varias muestras de su impronta, contemplando un total de 66 internacionalidades y 17 goles entre Sudáfrica 2010 y Brasil 2014.

En la cima de este ranking especial no podía estar otro que David Silva. Desde Arguineguín (1986) -al igual que Valerón-, el actual jugador del Manchester City se ha labrado un currículum deportivo con mayúsculas. Una Eurocopa Sub 19, dos Eurocopas absolutas y un Mundial (116 partidos y 33 goles con el combinado nacional).

Silva será el único isleño presente en el equipo de Fernando Hierro, cayéndose de la lista final jugadores que intentaron asomarse como Vitolo o Viera. Sudáfrica 2010, Brasil 2014 y ahora Rusia 2018. Dice que será su último mundial... y puede que el de la consagración a una gran carrera.