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La portería, cuestión de estado

La portería, cuestión de estado

Una vez finalizada la temporada, llega el turno del trabajo en los despachos. Son muchos los deberes que tiene por delante la directiva de la UD con hasta seis jugadores que terminan contrato a finales del próximo mes. Dos de ellos, los guardianes de la portería: Varas y Lizoain. Ambos, casos delicados y de futuro incierto.

Lunes, 20 de julio 2020, 06:24

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Anunciada recientemente la más sonada y, quizás, más complicada por el cartel del futbolista, la renovación de Boateng ha sido la única que la UD ha hecho oficial en los últimos días. En noviembre fue Bigas quien ampliaba su relación con el equipo grancanario hasta el 2021. Pero nada más. Desde el club siempre se trasladó la intención de dejar para el cierre de campaña los asuntos de oficina, instando a que desde todos los estamentos la atención estuviese puesta en lo meramente deportivo. Pero ahora ha llegado el momento de decidir las líneas a seguir con aquellos jugadores que quedarán libres en poco más de un mes.

En la portería, tanto Raúl Lizoain como Javi Varas acaban contrato y la situación de ambos ha ido cambiando a lo largo de la campaña. Si hace varios meses, el club tenía la convicción de renovarles, el bajón en el rendimiento en las últimas jornadas ha llevado a una reflexión. La portería amarilla terminó siendo la tercera más goleada del campeonato y Las Palmas, el único equipo en recibir gol en todas sus salidas. Tanto a Varas como a Lizoain, el club ya les ha hecho una oferta para que continúen de amarillo, pero el sentir de una parte de la directiva es que lo mejor sería dar un cambio de aires en la portería.

En este caso no ha sido culpa de falta de continuidad o de confianza, Setién ha rotado mucho bajo palos y los dos han tenido oportunidades de sobra para reivindicarse. Pero lo cierto es que ni el guardameta andaluz ha sido el del primer año, y el canterano tampoco ha logrado disipar las dudas que siempre le han acompañado desde que aterrizase en el primer equipo. Lizaoin ha jugado 1.170 minutos en 13 partidos habiendo recibido 27 goles. Más de dos tantos por encuentro que lo han puesto en la diana en más de una ocasión. Parte de la afición amarilla ha llegado a pitarle, como ocurrió ante el Celta (3-3). Se valora que sea de la casa y el buen comportamiento que ha mostrado siempre. Tampoco se dudan de sus capacidades, pero la realidad es que el isleño no ha terminado de convencer.

Por el otro lado está Varas. Con 34 años, el ex del Valladolid acabó con muchas dudas el curso. Sus fallos en la salida, el último ante el Leganés, han costado puntos y han golpeado en su confianza. El andaluz se ha vestido de corto en 25 ocasiones, acumulando 2.250 minutos y ha encajado 47 goles. Unos datos que empeoran en sus últimos cuatro partidos, donde encajó 13 goles.

Con este panorama, el club no ha dudado en rastrear el mercado. En principio, las ofertas para que renueven siguen en pie, pero Las Palmas no desaprovechará una oportunidad de incorporar uno o incluso dos guardametas. Ya han salido nombres y de aquí al 30 de junio todo puede pasar.

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