«Queremos recuperar la alegría, la energía y el espíritu del Granca»
El proyecto del Granca 2020-2021 avanza en la puesta a punto de sus piezas y en la búsqueda del sello del nuevo líder, Porfi Fisac. La ilusión marca una hoja de ruta ambiciosaJavier Beirán Capitán del Herbalife Gran Canaria
Voz autorizada en el actual Herbalife Gran Canaria por su trayectoria y por su importancia en el vestuario claretiano. El alero madrileño Javier Beirán, de 33 años, analiza la reconstrucción del proyecto en los despachos, en el banquillo y en la cancha tras dos temporadas irregulares sin cumplir los objetivos propuestos, al tiempo que acerca la metodología de Porfi Fisac y desmenuza aspectos capitales dentro y fuera de la cancha. Simboliza el entusiasmo por lo nuevo y la necesidad de volver a sonreír para alcanzar los puestos de privilegio en la Liga Endesa y en la Eurocopa.
–Cumple su sexta temporada en el Club Baloncesto Gran Canaria y será la primera como capitán. ¿Cómo afronta esta campaña? ¿Siente más responsabilidad por ostentar esta condición después de dos temporadas colectivas irregulares sin cumplir los objetivos?
–Afronto esta temporada con responsabilidad y con orgullo de ser el capitán del equipo, de representarlo en toda la isla y representar a todos mis compañeros, conociendo muy bien las casa. Hay ganas de recuperar un poco la ilusión después de los últimos años del equipo y, en un año complicado, intentando acercar al público que, en un principio, todavía no podrá estar con nosotros, pero que nos apoye, que nos siga y que esté muy orgulloso de nuestro trabajo.
–La continua reconstrucción de la entidad claretiana fue más allá este curso con la salida de Berdi Pérez de la dirección deportiva y la llegada de Willy Villar. Un aspecto a lo que se une el cambio en el banquillo con la salida de Fotis Katsikaris y la entrada de Porfi Fisac, y, al mismo tiempo, la marcha de piezas importantes dentro y fuera de la cancha como Oriol Paulí y Xavi Rabaseda, suplida anímicamente con el retorno de Jacob Wiley. ¿Qué valoración hace de un proceso que comenzó incluso antes de la celebración de la fase final excepcional del pasado ejercicio de la Liga Endesa?
–Como dices, quizás este año se ha cambiado un poco más, sobre todo, la dirección deportiva con un doble cambio de director deportivo y entrenador porque, al final, Berdi llevaba ocho años en el cargo y con un nuevo proyecto de un entrenador que venía de hacer buenos años en San Sebastián y en Zaragoza, especialmente los últimos. Porfi Fisac viene con mucha ilusión y con ganas de cambiar esa cara y devolver la ilusión y la energía que siempre ha tenido el Granca, algo que quizás se ha perdido un poco en los últimas temporadas.
–El nuevo proyecto persigue ilusionar y conectar con la afición. ¿Ve motivos para conseguirlo?
–Sí, ya digo que es un año complicado porque muchas de esas sensaciones se transmiten en la pista, pero vamos a tener que hacer un esfuerzo mayor para hacerlo porque tiene pinta que no habrá público en un principio, y será más difícil. Vamos a intentar hacer nuestro trabajo igual, intentar sentirles cuando jugamos en casa como si estuvieran. Creo que hay un equipo, y es el mensaje que nos están transmitiendo aparte lógicamente de las cosas que tenemos que hacer, para volver a esa línea. Hay que tener energía y alegría jugando, que creo que también es importante, y así llegarán los resultados y volveremos a estar arriba.
–¿Qué le transmite Porfi Fisac? ¿Qué destaca de su propuesta?
–Un juego dinámico, alegre, en el que juguemos sin miedo y la participación de todos los compañeros, ahora que somos 15 con los jugadores que estaban en el LEB Plata la pasada temporada y que ahora son parte del equipo. Todavía estamos fijando un poco las bases, las jugadas, la defensa, pero ya cogiendo la esencia de lo que vamos a tener que hacer esta temporada y cómo vamos a poder conectar con nosotros y con el entrenador.
–Supone un giro radical con respecto a Fotis Katsikaris, ¿no?
–Bueno, es otro estilo de entrenador y de llevar las cosas. Al final, cada entrenador tiene su librillo de las cosas que le funcionan, que le han ido bien, muchas veces depende también de los jugadores, pero nosotros tenemos que tener la capacidad de adaptarnos y de estar preparados para lo que viene. Llevamos prácticamente tres semanas y lo estamos cogiendo bastante bien, pero aún restan tres semanas por delante con cinco partidos para proseguir avanzando.
–Destacan los movimientos en el mercado con Andrew Albicy, Frankie Ferrari, Amedeo Della Valle y Jacob Wiley...
–Son jugadores contrastados, algunos vienen de la Euroliga y con mucho peso ofensivo. Vienen con ilusión a este proyecto y creo que eso es importante. A Jacob no lo considero nuevo, pero estuvo poquito aquí, transmite mucha energía. Creo que hay una buena dinámica en el equipo y eso se está notando en los entrenamientos y en el ambiente.
–Permanece Stan Okoye en la rotación exterior a pesar de tener pie y medio fuera en el plan inicial. Parece que ha recuperado la sonrisa con el entrenador segoviano con el que brilló en el Zaragoza. ¿Cómo lo ve?
–Stan hizo su mejor temporada en la ACB junto a Porfi, su llegada le motiva, le vuelve a meter en un proyecto en el que se veía fuera después de un año que no fue fácil para él, ya que nunca se llegó a encontrar a gusto en el equipo ni tuvo la temporada esperada tanto a nivel individual como colectivo. Ahora está con muchas ganas de volver a ayudar al equipo, de hacer las cosas bien y creo que está más a gusto que la pasada temporada, también es su segundo año en la isla y todo eso nos va a ayudar a que aporte más y, sin duda, que sea mejor jugador del que vimos el año pasado.
–Sin embargo, Xavi Rabaseda y Oriol Paulí abandonaron la isla tras cinco y seis cursos defendiendo la camiseta amarilla, respectivamente. ¿Qué visión tiene?
–Las salidas de Xavi y Oriol son decisiones que toma el club, llevaban muchos años y yo viví algo parecido en mi primera etapa. A veces no esperas eso como jugador porque te sientes muy bien y muy a gusto, pero el club piensa en otro proyecto, en otra idea y quiere cambiar. Paso hace dos temporadas con Eulis Báez y Albert Oliver, aunque eran más veteranos, ahora pasó con ellos que son buenos jugadores y han encontrado buenos equipos. Seguro que harán una buena temporada, pero aquí ya tenemos que cambiar el chip e intentar formar el grupo lo antes posible.
–La pérdida de identidad en el vestuario ha sido motivo de crítica en el entorno del Granca. Desde su nueva posición, ¿cómo se puede recuperar esa química?
–Creo que la unión ya la estamos teniendo, aunque poco a poco lógicamente. Nos llevamos bien, que eso es importante, y estamos encajando, no todos los años se encaja igual, pero creo que eso está empezando a funcionar. Y luego se consigue disfrutando jugando y ganando, los aficionados disfrutan viéndonos jugar bien, viéndonos ganar y enseguida se aprenderán todos los nombres en cuanto las cosas vayan bien. Lógicamente, pides más ayuda cuando las cosas van mal, ya que cuando van bien es más fácil recuperar esa ilusión. Es la línea que queremos volver a llevar de jugar bien, alegre y de recuperar ese espíritu del Granca de ser muy fuertes en casa y de ser un equipo sólido y duro.
–Hablaba de los jóvenes que trabajan con el primer equipo, como Jovan Kljajic, Olek Balcerowski, Khalifa Diop, Rubén de la Torre y Jean Montero. Los tres primeros dispusieron de muchos minutos en el primer test de pretemporada ante el Iberostar Tenerife en el Gran Canaria Arena. ¿Los ve preparados para ayudar ya?
–Creo que tienen que seguir trabajando, ya solo tener la puerta abierta y la oportunidad es una ventaja para ellos, que en muchos sitios o ellos lo han podido vivir siendo más jóvenes no es fácil encontrar. Que la aprovechen al máximo, que escuchen muchísimo al entrenador y a la gente que sabe y que les rodea, y que trabajen porque hay ciertos huecos. El entrenador ha demostrado otros años que, si trabajan, pues confía en ellos y que pueden dar el nivel. El otro día trabajaron bien, lógicamente cometen errores, pero es algo que vamos a hacerlo siempre todos los jugadores. Lo importante es estar concentrado para no cometer errores graves y seguir trabajando porque tienen una oportunidad, llevan formándose para ello años y la tienen que aprovechar. Son jugadores que están con sus selecciones y pueden tener ahora la oportunidad de sumar y de ser importantes en nuestro equipo en las rotaciones.
–Hoy será la segunda prueba ante el mismo rival en La Laguna. ¿Le sorprendió el nivel de intensidad y de competitividad en el primer encuentro?
–Creo que estamos entrenando a un alto nivel y, al haber hecho dos equipos, teníamos la energía suficiente. Vamos a ver en estos partidos en los que sumamos más entrenamientos y nos vamos preparando para ese inicio, que si toda va bien será el 17 o el 19 de septiembre. Creo que hay que estar al nivel físico, de defensa y de contraataque que queremos buscar, luego ya está la toma de decisiones, que siempre se puede mejorar, pero ese nivel de ataque, de defensa y, sobre todo, de ritmo es el que queremos llevar todo el año e intentamos llevar a cabo en cada entrenamiento.
–El público da sentido al deporte en innumerables aspectos. ¿Le costó jugar sin público en la burbuja montada por la ACB en Valencia para la pasada fase final? ¿Qué piensa sobre volver a hacerlo durante gran parte de esta temporada o con un aforo tremendamente reducido?
–Pierdes la conexión con el público, especialmente en casa, esa relación que, al final, es emocionante, también transmite y ayuda a competir. La tienes que buscar en otras cosas, estar más unidos como equipo, motivarnos más como equipo, animarnos más, todo se oye en la pista... Aprender de las sensaciones de la burbuja y estar preparados porque seguro que vamos a empezar sin público y veremos hasta qué punto. En eso estamos, entrenamos todos los días así y hay que estar más unidos, buscar la concentración individual y colectiva y estar preparados para cualquier cosa.
–El mes de septiembre, previsto para la Supercopa y el inicio de Liga, está a la vuelta de la esquina y se continúa a la espera del protocolo sanitario del Consejo Superior de Deportes (CSD), del calendario de la ACB o de aclarar si finalmente se podrá disputar la Eurocopa, entre otras cosas. Ahora mismo todo es un mundo y con diferentes escenarios. ¿Qué análisis hace de lo que está por venir?
–Sí, hay que olvidarse de todo un poco cada semana y más ahora que las cosas no están yendo a mejor en la península y en Canarias hay alguna restricción más. Tenemos que ser responsables con las normas que ya tenemos a nivel general y deportivo, siempre con el lavado de las manos y el uso de la mascarilla, antes de cada partidos hacemos PCR. Hay que tener mucha responsabilidad y centrarnos en lo nuestro, no podemos estar pendientes de cuándo vamos a jugar o si no se juega. Ahora tenemos en mente que jugamos dos competiciones y, si finalmente no se puede jugar la Eurocup por estos motivos porque viajar por Europa es complicado, pues jugaremos la Liga y ojalá se puede jugar de una forma normal. Pero, como quizás pasó un poco la pasada temporada que no sabíamos nada a nivel deportivo ni social, ahora volvemos a estar mal y hay que ser un poco más responsables, pero poco a poco van a empezar los colegios, la Liga, y en eso tenemos que estar concentrados, no estar pensando cuándo jugamos o no.
–Usted se implica en campañas sociales o solidarias. ¿Qué se le puede decir a la gente para que sea consciente de la gravedad de la situación?
–Que mucho depende de nosotros. Quizás no lo hemos hecho en verano lo mejor que podíamos, lo pasamos mal a nivel social en marzo y abril, aprendamos un poco de eso y tengamos responsabilidad. Sabemos las medidas que tenemos que tomar y todo mejorará. Si cada uno hace un poquito en su responsabilidad individual, las cosas volverán a estar un poco mejor y tendremos la vida que queríamos y que hemos tenido en junio o en julio.