El alero argentino fundamentó su galardón en una actuación antológica en la Jornada 19, en la victoria contra Unicaja. En ese duelo, Nico se desmelenó hasta alcanzar un nivel que rozó la excelencia, con 35 puntos, nueve rebotes, tres asistencias, un robo y 49 créditos de valoración, quinto mejor registro de este siglo en Liga Endesa, a solo 5 del tope absoluto de Pete Mickeal (54).
Aquellos 49 de valoración le permitieron también firmar la quinta mejor marca de todos los tiempos del conjunto canario, ser el Mejor Jugador Latinoamericano por séptima vez en el curso -12 en Liga Endesa- y, de paso, vestirse de Jugador de la Jornada en la J19, algo que también logró por vez primera en su trayectoria acb.
Pero, por encima de todo, para los libros de historia quedará su increíble serie a la hora de mirar a canasta: 5/5 en tiros de dos y 5/5 en triples. Jamás antes un jugador había anotado 35 puntos o más en un partido con un 100% de acierto en tiros de campo.
Con los 49 de valoración como mejor aval, todo se le puso de cara para ser MVP Movistar de febrero tras la Jornada 20, si bien Brussino, pese a no estar muy acertado en el tiro contra Valencia Basket -2/8 en tiros de campo, con solo cinco puntos-, sí volvió a aparecer por todas partes -ocho rebotes, cuatro asistencias y tres faltas recibidas- para alcanzar los 14 de valoración.
En total, 20 puntos, 8,5 rebotes, 3,5 asistencias y 31,5 de valoración media, con 83,3% en tiros libres (10/12) 66,7% en tiros de dos (6/9) y 66,7% en triples (6/9). Cifras sobresalientes para celebrar su primera nominación como MVP Movistar desde que aterrizase en Liga Endesa allá por la 2017-18.
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