La mejoría del Granca no le basta para sorprender al líder

Anthony Randolph, con veinte puntos y diez rebotes, y Walter Tavares, con cinco capturas, cuatro tapones y gran poder intimidador, destacaron en los locales, mientras que DJ Strawberry y Eulis Baéz, con 20 y 14 puntos, lideraron el ataque amarillo.

A base de triples, el Herbalife logró golpear primero al vigente campeón. Los aciertos iniciales de Kim Tillie, Marcus Eriksson y, por partida doble, DJ Strawberry dieron las primeras ventajas a los visitantes, que hacían añicos la defensa blanca con su efectividad desde el perímetro (4-12, min 3.30).

Además, Walter Tavares se fue al banquillo a los cuatro minutos tras cometer su segunda falta, lo que supuso un alivio para el ataque canario, que llegó por delante al ecuador del cuarto inicial a pesar de no haber sumado ninguna canasta de dos puntos.

El acierto de un letal Strawberry, con 3/3 en triples y once de los 19 primeros puntos de su equipo, se vio acompañado por el buen trabajo de sus compañeros, que firmaban un espectacular seis de ocho desde la línea de 6,75 en los primeros diez minutos de juego.

Todos aportaban y las ventajas llegaron a ser de ocho puntos tras sendas canastas del dominicano Eulis Báez. El cuarto inicial acabó con buenas sensaciones y 22-28 en el marcador.

En solo dos minutos, la mejoría del Real Madrid en la reanudación difuminó la renta de un Granca valiente que no se descompuso y, con un nuevo parcial de 0-5, tomó aire ante un equipo blanco que amenazaba con más argumentos que en el comienzo, gracias en gran parta a su mejoría desde el arco y a los rebotes.

Llegó entonces un intercambio de golpes que benefició al espectáculo. Los ataques se imponían a las defensas y al ecuador del segundo cuarto se llegó con un 37-41 para un Herbalife que sumaba a esas alturas nueve triples de doce intentos.

A base de lucha, el Real Madrid logró remontar con una canasta de Anthony Randolph que le puso por delante muchos minutos después (44-41, min 18), coincidiendo con un apagón anotador de los hombres que dirige Salva Maldonado, que se fueron al descanso perdiendo por 47-43 y con la cabeza muy alta.

Un 0-4 volvió a equilibrar el choque, pero llegaron entonces otros dos nuevos tapones de Tavares, que intimidaba en su vuelta a la parqué a los pívots de su exequipo, y nuevas canastas de Anthony Randolph y el Real Madrid amagó entonces con su primera escapada (55-47, min 14), obligando a Maldonado a parar el partido.

El Granca se iba desinflando y no veía cómo desbordar la retaguardia blanca. Pasó varios minutos sin ver aro, lo que fue ampliando la brecha gracias a cinco puntos de un gran Facundo Campazzo que culminaron un parcial de 13-0 (60-47, min 27).

Cuando más negro se puso el panorama, una sensible mejoría defensiva permitió un nuevo arreón del club isleño, que fue capaz de llegar con vida a los últimos diez minutos (62-57, min. 30).

No perdieron la cara los visitantes, que con un triple de Eulis Báez se situaron a cuatro puntos (66-62), pero a cada acercamiento respondían los de Pablo Laso con acciones de calidad y un 9-0 volvió a dejar las cosas en su sitio a menos de cinco minutos para el final (75-62).

No se rindió el Herbalife, que solo se vio arrollado en los últimos dos minutos y que acabó perdiendo por 89-76. Al final, se cumplió la lógica y el mejor ataque de la competición se acabó imponiendo a la peor defensa del torneo, aunque la imagen del Granca fue muy diferente a la ofrecida en anteriores partidos.

89 - Real Madrid (22+25+15+27): Causeur (7), Randolph (20), Campazzo (10), Tavares (4) y Taylor (4) -equipo inicial-, Rudy (9), Reyes (7), Carroll (8), Deck, Prepelic (13) y Thompkins (7).

76 - Herbalife Gran Canaria (28+15+14+19): Hannah (7), Eriksson (5), Pasecniks (2), Strawberry (20) y Tillie (6) -equipo inicial-, Oliver, Balvin (6), Báez (14), Paulí (4), Rabaseda (5), Evans (5) y Radicevic (2).

Árbitros: Borys Ryzhyk (UKR), Matej Boltauzer (ESL) y Ersan Kartal (TUR). Sin eliminados.

Incidencias: Partido correspondiente a la octava jornada de la Euroliga disputado en el Palacio de Deportes (WiZink Center) de Madrid ante 7.328 espectadores.