A disipar las dudas en Miribilla
Alto voltaje con el playoff y la permanencia en juego. El Herbalife Gran Canaria se mide este miércoles (19.00 horas. Multideporte 2 -dial 192-) ante el necesitado RETAbet Bilbao Basket en Miribilla, con la obligación de imponer su superioridad para no complicarse su presencia en las eliminatorias por el título.
Me preocupa que nosotros volvamos a sentir lo que sentíamos hace varias jornadas, que se hablaba que podíamos disputar la tercera plaza», reflexionó el entrenador del Herbalife Gran Canaria, Luis Casimiro, en la previa de un encuentro trascendental, en el que se presenta tras haber cedido en tres de sus últimos cuatro compromisos en la competición doméstica. Una derrota ante un RETAbet Bilbao Basket con urgencias acrecentaría la mala dinámica y la dificultad de disputar las eliminatorias por el título liguero.
El equipo claretiano, séptimo clasificado con un balance de 15 victorias y 11 derrotas, ha sucumbido ante el Baskonia (91-66), el Divina Seguros Joventut (92-91) y el FC Barcelona Lassa (77-93), superando con sufrimiento al MoraBanc Andorra (99-95), anotando 83.25 puntos de media en estos choques, pero recibiendo 92.75 puntos por duelo, un aspecto que ha dinamitado las opciones amarillas de ser cabeza de serie en la lucha por el entorchado de la Liga Endesa.
«No somos un gran equipo defensivo, lo hemos demostrado durante toda la temporada. Sobre todo, cuando teníamos a nuestro máximo anotador (Marcus Eriksson), un gran equipo ofensivo, donde hacíamos puntos con mucha facilidad. Nuestro ataque rondaba los 90 puntos, pero no nos hemos caracterizado este año por ser buenos en defensa. Sí que tenemos que tener más rigor en el aspecto defensivo a la hora de desarrollar nuestro trabajo, para que al menos cuando no tengamos tanta fluidez en ataque, controlar el partido a través de la defensa y el rebote», apuntó Casimiro, quien mantiene la baja del alero sueco, su principal amenaza ofensiva, pero ya en la recta final de la recuperación de la fractura en el hueso grande de su muñeca derecha, mientras que Pablo Aguilar, con molestias en un tobillo, jugará infiltrado.
Por su parte, la escuadra bílbaína, que ocupa la antepenúltima plaza con siete triunfos y 19 derrotas, únicamente se ha impuesto en uno de los últimos diez encuentros, y se encomienda al ambiente del exigente Miribilla para ahuyentar los fantasmas de caer en la zona movediza.
El base experimentado Javi Salgado dijo que «tenemos la oportunidad de demostrar que seguimos siendo un buen equipo, que queremos competir y que queremos ganar».