La agencia libre de la NBA arranca con cambios relevantes y nuevas regulaciones

La agencia libre de la NBA ha comenzado oficialmente este lunes 1 de julio, permitiendo a los 30 equipos de la liga negociar libremente con jugadores sin contrato. Antes de esta fecha, las franquicias podían acordar renovaciones con sus agentes libres, pero ahora el mercado se abre completamente y ofrece oportunidades significativas para todas las franquicias.

El periodo de fichajes en la Agencia Libre es crucial para cada equipo, y en 2024 nombres de alto calibre como LeBron James, Paul George, James Harden, DeMar DeRozan, entre otros, podrían estar buscando un cambio de aire. Los cambios en el Convenio Colectivo han permitido a algunos jugadores volver a firmar con sus equipos actuales, sacándolos del tablero de agentes libres potenciales.

El nuevo Convenio Colectivo, que ha entrado en vigor esta temporada, introduce un concepto clave: el 'segundo apron'. Este busca fomentar la igualdad, erradicar los superequipos y complicar las operaciones de traspaso. La NBA, aunque funciona con un límite salarial 'blando' (soft cap), ha implementado nuevas regulaciones para controlar mejor a los equipos.

El límite salarial para esta temporada es de $141 millones, pero los equipos no pagan impuesto de lujo hasta los $171.3 millones. Existen dos cifras críticas adicionales: el primer apron ($178.7 millones) y el segundo apron ($189.5 millones). Las franquicias que superan estos límites enfrentan restricciones significativas en sus operaciones.

Los equipos que superan los $178.7 millones no pueden:

-Conseguir un jugador vía sign-and-trade (renovar a un jugador para ser traspasado).

-Usar una excepción de traspaso (TPE) conseguida en un traspaso previo.

-Recibir más del 100% de los salarios en un traspaso.

-Firmar a un jugador en el mercado de buyouts cuyo salario antes de ser cortado supera la excepción de nivel medio para equipos fuera del impuesto de lujo (NT-MLE).

Para las franquicias que exceden los $189.5 millones, las restricciones son aún mayores:

-No pueden agregar salarios enviados en un traspaso.

-No pueden enviar dinero en efectivo.

-No pueden realizar un sign-and-trade si el salario que reciben supera el segundo apron.

-No pueden adquirir un jugador usando una TPE obtenida en un sign-and-trade (renovar a un jugador para ser traspasado).

Además, la NBA ha introducido el concepto de hard-cap, que impone un límite máximo que los equipos no pueden superar bajo ninguna circunstancia, complicando aún más las operaciones.

El caso de Paul George es ilustrativo: se rumoreaba su asociación con Golden State, pero las restricciones de sign-and-trade hacen inviable este movimiento. De manera similar, los Dallas Mavericks buscan renovar a Derrick Jones Jr., pero el uso de la mid-level exception los dejaría hard-capped en $178.7 millones, forzándolos a liberar espacio salarial.

El inicio de la Agencia Libre ha visto ya algunos movimientos notables: Pascal Siakam ha regresado a los Indiana Pacers con un contrato de $189.5 millones, OG Anunoby firmó con los Knicks por $212.5 millones, Immanuel Quickley acordó quedarse con los Raptors por $175 millones, Nic Claxton renovó con Brooklyn por cuatro años y $100 millones, y Malik Monk volvió con los Kings tras ganar el premio al Sexto Hombre del Año, con un contrato de $78 millones. Otros jugadores importantes también renovaron sus contratos la temporada pasada, como Grayson Allen (Suns), Mike Conley (Timberwolves) y Jrue Holiday (Celtics).

En la categoría de base de $30 millones por temporada, DeMar DeRozan podría estar buscando un nuevo comienzo en un equipo ganador como Filadelfia, buscando complementar a jugadores clave como Joel Embiid para fortalecer la competencia de los 76ers. Paul George, aunque los Warriors no sean una opción viable, podría encontrar un entorno ideal en una alineación junto a Stephen Curry y Draymond Green, aprovechando su versatilidad y experiencia en los Clippers. James Harden continúa aportando valor y química al equipo de los Clippers, aunque su durabilidad sigue siendo una preocupación para los directivos del equipo. Mientras tanto, LeBron James, a sus 39 años, sigue siendo un talento de élite en la liga, con una lista de posibles equipos reducida pero con un impacto significativo en los Lakers de Los Ángeles.

En la categoría de jugadores entre $15 y $20 millones por temporada, Isaiah Hartenstein se destaca como un pívot valioso para los Knicks, aportando una presencia crucial en la pintura que complementa las aspiraciones del equipo hacia un título. Klay Thompson, aunque no sea el defensor de antaño, sigue siendo un tirador muy solicitado por su habilidad para anotar desde el perímetro y su experiencia en playoffs con los Warriors. Buddy Hield es ideal para equipos que buscan un lanzador consistente desde el exterior, siendo una opción valiosa para los 76ers. Tobias Harris, a menudo subestimado, contribuye de manera constante en anotación y otros aspectos del juego, siendo un activo crucial para el éxito de Philadelphia.

Con estas dinámicas en juego, julio promete ser un mes clave para la NBA, definiendo el rumbo de muchas franquicias y estableciendo el escenario para la próxima temporada.

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