Citas con un Mar Abierto ecléctico y sostenible

Todo ello enmarcado en una apuesta por la diversidad que ha sido característica de la iniciativa desde sus comienzos y de la que da fe el «ecléctico» cartel de 2024, que abrirá un cantante bastante más joven, Antoñito Molina, con actuaciones programadas este viernes en Tenerife, el sábado en Fuerteventura y el domingo en Gran Canaria, según ha destacado al presentarla este jueves su director, Jairo Núñez.

Con un presupuesto de 4,61 millones de euros, se prevé que el festival movilice, en conjunto y sumando el público a congregar en todas las actividades que se desarrollarán e entre las tres islas por las que se reparten sus escenarios, a unas 22.000 personas aproximadamente.

Para atraerlas, Mar Abierto oferta en esta ocasión un conjunto de seis conciertos en Gran Canaria, tres en Tenerife y dos en Fuerteventura, protagonizados por Silvia Pérez Cruz, Pablo López y María José Llergo, además de Omara Portuondo, Loquillo y Luz Casal, pero también debates, exposiciones y otros encuentros.

Algo que ha avanzado Antonio Morales, presidente del Cabildo de Gran Canaria, isla que -ha recalcado- «es la que concentra mayor número de actividades de este festival» en la actualidad, pese a que originariamente surgió en Tenerife y solo más tarde se extendió a otros rincones del archipiélago. Y ha destacado que a ese asentamiento ha contribuido el respaldo de la corporación insular, que ha justificado argumentando que promueve valores acordes con la filosofía de sus gobernantes, como el impulso del desarrollo sostenible, además de ser una cita, en lo estrictamente musical, que, según ha dicho, «atiende la demanda de nuestra población pero también atrae a otros públicos que vienen de fuera», sea de otras zonas de la región, del resto de España o de otros países.

Aspecto este último que lo hace rentable, al tiempo, desde la perspectiva de la promoción turística en el exterior, pues es «un festival que tiene un enorme impacto», ha asegurado.

Morales ha insistido en la importancia de la propuesta como elemento de concienciación social frente al cambio climático, en la medida en que su organización está comprometida con el uso de materiales reciclados y la gestión responsable del agua, acorde a los principios del Cabildo.

Pero no solo eso, sino que, a la vez, invita a participar en actividades cuyo propósito es precisamente contribuir a esa concienciación, como un taller gastronómico que dará pautas para cocinar y comer de forma más responsable, comprando productos de proximidad y haciendo una gestión adecuada de los alimentos, o la presentación de un libro de un fotógrafo submarinista.