Luis García Montero: «Cayuco no se puede utilizar para criminalizar»
El director del Instituto Cervantes ha denunciado en La Laguna que «el odio a lo hispano» crezca en Estados Unidos con Trump como presidente
Efe
La Laguna
Lunes, 28 de julio 2025, 22:57
El director del Instituto Cervantes, Luis García Montero, ha llamado este lunes a reflexionar sobre «qué cabe» en las palabras «cayuco, libertad, genocidio y mestizaje» porque, ha continuado, no se pueden usar para «criminalizar» a quien arriesga su vida, e imponer el sectarismo.
García Montero se ha referido a las vicisitudes del español como lengua de frontera y los desafíos que afronta la lengua, en la inauguración de la reunión anual de directores del Instituto Cervantes, que por primera vez se celebra en Canarias y cuya sesión de trabajo inicial ha presidido la reina Letizia.
En ella, se han reunido más de 70 directivos del Instituto Cervantes que han arrancado sus debates de tres días en la Universidad de La Laguna con los retos del español ante la administración de Donald Trump, Brasil y la llamada ley Lula, la convivencia con el francés en África y su futuro en India.
En un encuentro previo con los medios de comunicación, García Montero ha celebrado la elección de Canarias como sede de la reunión anual por ser el archipiélago «un puente fundamental» en la relación entre España y América Latina, y entre España y el África subsahariana.
Resulta fundamental reconocer en este ámbito el papel de España y de las islas en el itinerario de la inmigración, donde, ha dicho el director del Cervantes, solo cabe «un viaje de ida y vuelta y una relación que va más allá de la palabra 'cayuco'».
Como ejemplo ha citado la apertura de sedes del instituto en Senegal, Mauritania y una extensión en Angola, un área en la que García Montero prevé «mucho futuro por delante que tendrá que ver con Canarias».
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Ha rememorado el también poeta granadino que el Instituto Cervantes ha publicado dos cartas pastorales del fallecido papa Francisco, quien le comunicó en su momento que «maltratar a los inmigrantes es un pecado mortal» y, ha enfatizado, detrás de 'cayuco' se criminaliza el dolor de personas que se arriesgan para buscar una salida a su vida.
Además «tenemos que reflexionar» sobre el término 'libertad', pues «me preocupa mucho estar viviendo en un mundo que está buscando otro significado: el de la ley del más fuerte».
También ha animado a pensar sobre la palabra 'genocidio', pues es «infame» lo que ocurre en Gaza, y sobre 'mestizaje' ante el «sectarismo de las identidades cerradas» frente al entendimiento del otro, la fraternidad y la multilateralidad, que es «a lo que nos dedicamos».
Odio a lo hispano en EE UU
García Montero ha criticado que Europa «se haya humillado y arrodillado ante un millonario que cree en la ley del más fuerte» y ha dicho que está «muy preocupado» por la situación del español en Estados Unidos ante «el odio a lo hispano».
Ha considerado también «indispensable» que España de «vuelva los ojos» hacia América Latina y el África subsahariana.
En todo caso se ha sentido «orgulloso» de la dignidad que ha mostrado el Gobierno español, que «ha dicho no a (Donald) Trump» en su exigencia de comprar más armas, todo lo contrario de la sensación que tiene hoy, cuando en Europa «estamos un poquito humillados tras vernos arrodillados ante un millonario en su campo de golf», ha indicado en alusión al encuentro ayer entre Ursula Von der Leyen y el presidente estadounidense para el acuerdo sobre los aranceles.
Además, ha continuado, el Instituto Cervantes ve con preocupación cómo Trump representa una idea supremacista de la identidad y se ha convertido en un enemigo del español en Estados Unidos, propagando «una mirada despectiva a los hispanos» que ha llevado a que niñas que en el colegio hablan español o compradores en un supermercado sean insultados.
«Se está generando un discurso de odio a lo hispano» en Estados Unidos que García Montero relaciona con la pérdida en el número de alumnos de Filología y de español, pues «la liquidación de estudios humanísticos» se debe a que «la cultura crea conciencia crítica». No obstante, también ha señalado que, con más de 60 millones de hablantes, el español sigue fuerte en Estados Unidos y se está generando una conciencia de fortaleza, en lo que ha enmarcado el acuerdo entre el Instituto Cervantes y la Cámara de Diputados de México.