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La escritora canaria Helen Rytkönen tiene claro que una buena novela romántica puede tener distintos ingredientes, pero hay algunos que son imprescindibles para llegar a buen puerto.
«La gran premisa es tenga un final feliz o satisfactorio. La trama tiene que ser sólida, con un conflicto potente y creíble para que se acabe resolviendo durante su desarrollo. Hay muchas novelas románticas cuya historia no te la puedes creer en ningún momento. Los príncipes azules son historia», subraya la escritora isleña desde Tenerife, en plena promoción de su novela romántica 'Bajo el sol de medianoche' (Grijalbo).
«No es un culebrón, ni una novela cursi. Es realista, sobre gente que tiene su vida y sus historias», aclara sobre una ficción que tiene como protagonista a Elisa. Una terrible pérdida acaba generando su separación de Mario, al que consideraba el gran amor de su vida, lo que la lleva a entrar en un momento muy difícil. El sol vuelve a brillar en su vida cuando le llega una oferta de trabajo en un pueblo de Finlandia, que no duda en aceptar, aunque para ello tenga que dejar Tenerife. Pero antes de partir, asistirá a la boda de su mejor amigo, en un idílico enclave de la isla donde se topará con Mario.
«Siempre tuve claro que quería escribir una novela que transcurriera, en parte, en Finlandia. De pequeña yo iba mucho para allá, pasé varios veranos, porque mi madre es de allí. Tras un congreso sobre novela romántica en Valencia decidí escribir 'Bajo el sol de medianoche', como el comienzo de una serie protagonizada por cuatro hermanos. El primer libro es el de Elisa», apunta.
Reconoce que hace tiempo que no visita Finlandia, pero para ambientar la trama se documentó «sobre las cosas prácticas» del país, como el funcionamiento de su sistema nacional de salud y otros detalles. Un trabajo previo para el que también tiró de sus «primas», que la fueron poniendo al día.
Apunta que la primera historia de esta serie literaria titulada 'Atlántica' se puede entender como una ficción «sobre las segundas oportunidades». «Casi todas las personas con cuarenta y pico años suelen desesperarse, aspiran a volver a reencontrarse con los que consideran como el gran amor de sus vidas para ver si pueden volver a convivir o no. La novela cuenta también con una subtrama que prefiero no contar y que se desarrolla con el miedo a enfrentarse a ese viaje físico y psíquico por parte de los personajes principales», subraya.
Cada entrega de 'Atlántica' será independiente, aunque sus lectores se toparán con algunos personas que figuran en los otros volúmenes. El segundo libro, 'A la sombra de los naranjos', acaba de desembarcar en las librerías y tiene como protagonista a Victoria Olivares, una empresaria de éxito que decide abandonar su carrera profesional para apoyar la de su marido arquitecto. Veinte años después verá que está en un callejón sin salida.
Helen Rytkönen reconoce que la novela romántica está rodeada de tópicos y que uno de ellos es que es un género que solo leen las mujeres. «Es cierto que son ellas las que más leen estas novelas, pero cada vez hay más hombres que las disfrutan. Lo importante es leer, porque abre la mente y la imaginación de las personas. Hace disfrutar y permite soñar desde el sofá de casa. Yo leo de todo, me gusta mucho la novela negra, por ejemplo, los libros del sueco Henning Mankell, entre otros», asegura la escritora.
Rytkönen considera que entre los valores que entraña la lectura está la posibilidad de escaparse por unas horas de una realidad tan convulsa como la actual y a todos los niveles. «Si te apetece acabar con una sonrisa en los labios, con emociones bonitas y el corazón calentito, las buenas novelas románticas son ideales», apunta la escritora que vive en la localidad tinerfeña de la Esperanza.
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