Borrar
Una imagen de 'Blind Love'. C7
Una sociedad cegada por la intolerancia

Una sociedad cegada por la intolerancia

Sección Oficial. La joven cineasta taiwanesa Julian Chou compite con 'Blind Love', una película que reflexiona sobre una sociedad que no tolera las parejas homosexuales y las falsas apariencias en la sociedad de su país

Victoriano Suárez Álamo

Las Palmas de Gran Canaria

Martes, 29 de abril 2025, 02:00

La intolerancia es un enemigo feroz. Ni siquiera el paso del tiempo logra tumbarla por completo. Al contrario, incluso logra fortalecerse año a año hasta límites insostenibles en algunos enclaves. Y últimamente, en la mayoría de los países. La actitud de despreciar al que piensa, siente y actúa de forma 'diferente' al canon que tradicionalmente se había establecido es el punto central de 'Blind Love' (Shi Ming), el largometraje con el que la joven cineasta taiwanesa Julian Chou compite en la Sección Oficial de la 24ª edición del Festival Internacional de Cine de Las Palmas de Gran Canaria.

Este 'Amor ciego', si nos ajustamos a una traducción literal del título, responde a la metáfora que plantea esta producción que aterriza en Gran Canaria tras su paso por los festivales de Osaka y Róterdam. Los protagonistas no son invidentes, pero sí que lo es una parte fundamental de la sociedad que no quiere ver como algo natural que dos personas del mismo sexo se atraigan y formen una pareja o un matrimonio.

La cineasta, que ha acudido a la isla para presentar al público y a la prensa el filme, explicó que en Taiwán se aprobó en 2019 la Ley que permite el matrimonio entre personas del mismo sexo, pero por un escaso margen de votos a favor. «No hubo mayoría absoluta, solo un escaso margen de votos a favor. Los que votaron en contra no van contra las personas que se casan, pero no están de acuerdo», explicó Julian Chou.

Para abordar esta realidad, la cineasta asiática fija la mirada en un matrimonio acomodado, que tiene dos hijos. El padre es un reputado médico al que su trabajo absorbe toda la energía. Su mujer lleva la intendencia y, en apariencia, es feliz.

Mientras tanto, su hijo mayor, ya adolescente, se topa en la escalera del edificio donde vive uno de sus amigos con una enigmática mujer de la edad de su madre. Se queda cautivado por ella y su mundo fotográfico.

Menos el exitoso médico, que es transparente, un ególatra obsesionado con el éxito laboral y con una mentalidad social ultraconservadora, todos los demás ocultan sus verdaderos sentimientos. La presión social así lo exige.

Han, un adolescente muy sensible, tiene claro, pero no lo dice, que su madre no es feliz. Y más claro aún tiene que no quiere convertirse en una réplica de su padre. De ahí que ni se le pase por la cabeza estudiar medicina, por mucho que le presionen. La mujer que se acaba de cruzar en su camino le abre aún más los ojos frente a la hipocresía dominante y a la constante represión voluntaria de los sentimientos que reina a su alrededor para no romper el 'status quo'.

Julian Chou, este lunes, en Gran Canaria. C7

Quien no está dispuesta a salirse del guion establecido es su madre, Shu-yi. Hasta que se topa con la misma mujer, Xue-jin, que ha cautivado en secreto a su hijo, con la que ella tuvo un romance cuando las dos estudiaban en la Universidad. Las dos siguieron los convencionalismos y se casaron con hombres. Finalmente Xue-jin, que compagina su trabajo como oftalmóloga con la fotografía, se divorció recientemente y tras salir del armario disfruta como nunca de la vida. Aunque sabe que el precio a pagar será alto, porque socialmente está mal visto el paso que ha dado.

Con estos melodramáticos mimbres vertebra su película Julian Chou. 145 minutos de vaivenes emocionales y sentimentales, dentro de un rompecabezas familiar y social en el que las piezas no encajan porque, como es natural, cada una requiere un molde diferente, fuera de la 'norma'.

'Blind Love' tiene momentos brillantes, genera una atmósfera opresiva de la que resulta complicado escapar en muchas fases. Mantiene en todo momento un envoltorio primoroso y una fotografía cuidada y sugerente en torno a un elenco muy efectivo. Pero el proyecto acaba naufragando en gran medida porque es demasiado ambicioso. Quiere contar tantas cosas que al final las reflexiones latentes se pisan o no se desarrollan como deberían.

Durante la rueda de prensa posterior al pase matutino de este lunes, la cineasta asiático dijo que la película se inspira en una novela que tuvo mucho éxito en su país y que lograr financiación para su realización fue especialmente difícil. «Sufrí bastante para conseguir el capital necesario. Arranqué a rodar cuando solo tenía el 50%. Incluso me planteé hipotecar mi casa. El problema es que en Taiwán, como se trataba de contar una historia de amor entre dos mujeres, muchos inversores se echaron atrás. Si hubiese sido entre dos hombres, habría sido más sencillo», reconoció quien finalmente logró apoyo económico gubernamental para rodar este proyecto. Un filme con el que espera «ayudar a la comunidad LGTBIQ+, donde tengo muchos amigos», a la vez que pone de manifiesto que «el mundo debe ser entendido como un crisol de distintas comunidades».

Esta funcionalidad es exclusiva para registrados.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

canarias7 Una sociedad cegada por la intolerancia