Las perpectivas de reactivación turística oscilan entre el optimismo y la prudencia

El enésimo retraso de la vuelta de los turistas británicos tras la decisión del Reino Unido de aplazar la desescalada hasta el 19 de julio ha supuesto un nuevo varapalo para el sector turístico canario, que ya no cuenta con recuperar su principal mercado al menos hasta agosto. Las perspectivas de mejora a medio plazo son sin embargo favorables, pese al factor de incertidumbre: el Gobierno canario maneja la previsión de alcanzar en verano al 50% de la ocupación que hubo en el mismo periodo de 2019 y estima que se podrá llegar al 70% para la temporada alta a partir de noviembre. Unas previsiones que, como advierte la consejera de Turismo, Yaiza Castilla, están condicionadas a que no se recrudezca la pandemia, a que se cumpla el plan de vacunación y a las decisiones que adopte el Gobierno británico.

Uno de cada treinta vuelos que aterrizan ahora Canarias procede de Reino Unido, frente a la proporción de uno de cada tres que había por estas mismas fechas en 2019. Y a la espera del Reino Unido, en el resto de los países emisores las perspectivas son significativamente mejores. «Prácticamente todos los operadores turísticos nos trasladan sus impresiones respecto al más que notorio incremento del interés por viajar pronto a Canarias y en países como Alemania, nuestro segundo mercado emisor, esperamos las mismas reservas que en verano de 2019 para los próximos tres meses», asegura Castilla.

Con este horizonte de creciente demanda de viajes, el Gobierno canario tiene abiertas dos líneas de actuación en aras de la recuperación de la conectividad aérea y el aumento de la ocupación de los vuelos. Por un lado, con un plan de incentivos a la conectividad que consiste en el pago de hasta 4 euros por plaza de avión que se programe por encima de un umbral mínimo que varía en función del mes, y por otro, con campañas de co-marketing con operadores turísticos, con el objetivo de recuperar los niveles de afluencia de años anteriores y acelerar la reactivación. 

Más de un año de desplome ha traído consecuencias durísimas para el sector que aporta el 35% del PIB canario y el 40 del empleo, pero la consejera de Turismo mantiene que la recuperación ya asoma con buen pie. «Desde la prudencia creo que podemos ser optimistas», señala, «el impacto económico ha sido extraordinario pero el contexto es ya favorable, después de tanto tiempo podemos mirar hacia un futuro de reactivación del turismo en la que Canarias será, una vez más, protagonista. Y lo será tanto en el mercado nacional como europeo», asegura.

El sector turístico canario sigue echando en falta un plan de rescate específico para impulsar la recuperación económica de las islas, anunciado en varias ocasiones por la ministra Reyes Maroto en sus visitas al archipiélago y que meses después sigue sin concretarse. La consejera Yaiza Castilla recuerda que Canarias, por su reconocida singularidad y el especial impacto del sector turístico en su economía, requiere de un trato especial que no ha recibido hasta ahora.

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