Día de Canarias

Nuestra isla es tan bella como vulnerable. En los últimos años, hemos vivido un crecimiento poblacional muy acelerado, lo que ha tensionado nuestros servicios, ha dificultado el acceso a una vivienda digna y ha evidenciado la necesidad de reforzar la seguridad ciudadana.

Por eso, la Fuerteventura que queremos construir no es la que crece sin rumbo, sino la que se piensa desde el respeto a su gente, a su paisaje y a su identidad. Necesitamos reforzar los servicios públicos, mejorar los recursos destinados a seguridad y, sobre todo, garantizar que quienes vivimos aquí podamos hacerlo con calidad de vida.

Uno de los grandes retos es el acceso a la vivienda. La solución no puede pasar por repetir errores del pasado con más construcción sin planificación. Necesitamos una estrategia insular que priorice a quienes habitan la isla, que evite el efecto llamada y que apueste por soluciones reales y sostenibles, dando prioridad a la recuperación de viviendas inacabadas o abandonadas frente a nuevas construcciones.

También debemos repensar nuestro modelo turístico. No se trata de crecer más, sino de hacerlo mejor. Apostemos por un turismo de calidad, que valore nuestro entorno, respete nuestra cultura y contribuya al desarrollo sin agotar nuestros recursos.

Y no olvidemos lo esencial: nuestro sector primario y nuestros pequeños empresarios, que son el corazón económico y social de esta isla. Agricultores, pescadores, ganaderos, emprendedores… cada uno de ellos sostiene, con esfuerzo diario, una parte fundamental de nuestras tradiciones y de nuestro futuro.

Fuerteventura es también cruce de culturas. En esta tierra conviven personas de muchos orígenes, y eso nos enriquece como sociedad, pero debemos hacer un esfuerzo por mantener intacta nuestra esencia e identidad como pueblo canario. A quienes han elegido esta isla como hogar, gracias por compartir este camino. Entre todas y todos, sigamos cuidando nuestras tradiciones, nuestras costumbres y nuestras raíces.

Hoy celebramos Canarias. Hagámoslo pensando en la tierra que queremos.