La residencia de mayores en Altavista se empezará a construir en semanas
El Cabildo finalmente aporta 10 millones de euros. La contratación, tras la primera piedra en 2009, depende de la Diócesis de Canarias
Entre final de año y las primeras semanas de 2026 se confía en que puedan estar en marcha los trabajos orientados a que haya una residencia de mayores en el barrio de Altavista, en Arrecife. La ejecución correrá a cargo de la Diócesis de Canarias, si bien con fondos que aporta el Cabildo, sirviendo de base la estructura que lleva años en estado de abandono.
Se está en estos días a expensas de que el Ayuntamiento capitalino conceda la licencia oficial definitiva. La actividad en la parcela, que durante los últimos años ha sido lugar de acomodo de personas sin techo, generándose con ello situaciones conflictivas en Altavista, se ejecutará por una de las tres empresas especializadas a las que se ha hecho una propuesta formal por parte de la entidad eclesiástica.
El presupuesto finalmente será de 10 millones de euros; por encima en consecuencia del desembolso de 8 millones de euros que se anunciaba el 21 de octubre de 2024, en un acto donde se daban detalles del acuerdo alcanzado por el presidente insular, Oswaldo Betancort; y el obispo titular, José Mazuelos. En fechas recientes se añadió una aportación de 2 millones de euros, que sale del remanente de la primera Corporación, ante la evidencia de que los precios del mercado han ido al alza en los últimos meses, según Marci Acuña, titular de la Consejería de Bienestar Social.
De base se aprovechará lo ya construido, tras meses de actividad tras la colocación de la primera piedra, en abril de 2009. Se tiene el propósito de que la nueva infraestructura pueda estar disponible bien avanzado 2027.
Cuatro edificios asociados
Serán cuatro edificios principales, interconectados, sobre una parcela de 3.000 metros cuadrados; atendiendo a lo explicado hace doce meses atrás por Martín Martín, el arquitecto responsable del proyecto. Hay previsto un espacio para 25 mayores, un comedor para 50 usuarios y un albergue con 20 plazas; junto con media docena de viviendas de acogida, con una capacidad inicial cifrada en 34 plazas. Además, la iniciativa incluye varios despachos y salas de reuniones, con una superficie en conjunto próxima a 7.000 metros cuadrados.
«Gracias al apoyo económico del Cabildo de Lanzarote se podrá construir, al fin, este centro único que traerá esperanza y una mejora real en la calidad de vida de muchos lanzaroteños y lanzaroteñas», aseguró el obispo en la presentación en sociedad de la iniciativa hace un año atrás. Se estima que hasta 180 personas podrían beneficiarse cada día, de forma directa, de los diferentes recursos sociales vinculados con la nueva infraestructura.