El gasto medio por estudiar fuera aumentó este curso en 208 euros
Cada vez resulta más común la aspiración de universitarios y alumnos de grados medios de conseguir colocación en la administración pública
José R. Sánchez López
Arrecife
Martes, 24 de junio 2025
Cada familia lanzaroteña o graciosera por cada miembro cursando estudios fuera del territorio insular tuvo que hacer frente en el curso 2024-2025 a un desembolso de al menos 9.416 euros, según informe dado a conocer por el Centro de Datos del Cabildo. Son 208 euros más que en el periodo escolar 2023-2024.
De estarse en suelo peninsular, la media por estudiante para completar el año escolar que termina en breve se ha elevado a 10.447 euros, valor casi idéntico al concretado en el curso previo. Son los más estos estudiantes, entre universitarios y matriculados en grados medios, puesto que suman el 59% de los cerca de 2.000 alumnos que están fuera de los límites de Lanzarote y La Graciosa.
Con presencia en las dos islas capitalinas en conjunto se observa un porcentaje del 40%, siendo los estudiantes desplazados a las islas capitalinas los que en menor medida soportaron gastos, con desembolso medio de 8.530 euros en caso de estar en Tenerife y 7.061 euros en caso de cursar las enseñanzas en Gran Canaria, con repunte en ambos casos. El 1% restante se corresponde con alumnado en el extranjero, con un desembolso medio en el curso establecido por encima de la media general.
Para hacer frente a las necesidades económicas, llama la atención que dos de cada cinco estudiantes no consiguieron disfrutar en este curso de becas o de ayudas al transporte, bien del Cabildo, bien de los ayuntamientos; aspecto que merece especial atención en el informe del Centro de Datos del Cabildo, con estructura similar al estudio versado en el curso escolar precedente, dado a conocer en el pasado otoño.
Con aspiración de regreso
Por otro lado, el informe precisa que casi el 60% del alumnado tiene intención de regresar, «para intentar desarrollar una actividad, trabajo o proyecto profesional cuando finalice sus estudios». El porcentaje es superior a estimaciones de estudios previos.
Y cabe tener en cuenta la consideración que del restante, son bastantes, más de un tercio, los que condicionan su falta de ganas, en cuanto al retorno, a que quieren seguir estudiando fuera, para más adelante sí volver.
Como aspecto anecdótico añadido, abundan los que confían en tener acomodo laboral en la administración pública en cuanto tengan la titulación. Bajo este epígrafe se concentra el 53% del alumnado arraigado en alguno de los siete municipios. Algo más de la cuarta parte prefiere trabajar en el sector privado. Una minoría significativa, cifrada en el 12 %, está interesada en emprender y establecer su propio negocio. El autoempleo es minoritario.
