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El pesquero ruso ardiendo en alta mar tras ser sacado del Puerto de La Luz. C7

Suerte, improvisación y falta de medios adecuados en la respuesta al desastre

Ezequiel Navío, el experto en mareas negras fichado para el rescate de la fauna afectada y la gestión del voluntariado, trabajó con más libertad en el Prestige

Jesús Quesada

Las Palmas de Gran Canaria

Sábado, 19 de abril 2025, 22:12

Con suerte, con improvisación y sin los medios adecuados. Así respondió Gran Canaria en particular y Canarias en general al vertido de fuel del pesquero ruso hundido al sur de Gran Canaria a juicio del experto Ezequiel Navío, coordinador del grupo de especialistas creado por los gobiernos canario y central para el rescate de la fauna afectada y el apoyo al voluntariado de limpieza de la costa.

Ezequiel Navío, con experiencia en mareas negras en Galicia y en el Golfo Pérsico, había sido el responsable de la Oficina de Acción Global contra los sondeos petrolíferos en aguas del archipiélago y su propuesta de nombramiento partió de las organizaciones no gubernamentales internacionales.

«Nos ha pillado dormidos y no puede volver a pasar una segunda vez», señaló Navío tras devolver a la Administración la posible movilización de voluntarios y exponer las conclusiones del trabajo hecho del 20 de abril al 11 de mayo. Para entonces se habían apuntado más de 600 voluntarios en toda Canarias para hacer labores de limpieza del piche derramado.

Una mujer combate con una red una de las primeras manchas de fuel en llegar a la costa. C7

Una vez creado el sistema de voluntariado, el refuerzo de rescate de fauna en Tafira (Gran Canaria) y La Tahonilla y los reconocimientos aéreos y por mar con científicos, «mi función es ponerlo sobre la mesa de las administraciones para que lo gestionen», indicaba Navío, quien aseguraba que con el programa concluido estaba tropezando con la negativa del Gobierno a activar voluntarios.

«No lo entiendo», afirmaba el experto, que aseguraba haber trabajado con más libertad con Mariano Rajoy en la crisis del Prestige que con el Oleg Naydenov en Canarias.

Además, el especialista en mareas negras insistió en conseguir procedimientos más efectivos, en particular en la limpieza de las playas de callaos, así como en la conveniencia de realizar ensayos con el voluntariado para estar preparados.

Durante aquellas jornadas la federación ecologista Ben Magec y La Otra Cara de la Tragedia, un colectivo ciudadano surgido a raíz del desastre del Oleg Naydenov, escenificaron ante la sede del Gobierno de Canarias en la capital grancanaria una playa de callaos manchados de piche, entre cabos, garrafas y guantes también petroleados.

El objetivo de la protesta era reclamar un plan de limpieza de choque de la costa afectada por el vertido, una investigación a fondo del incendio del barco en el Puerto de La Luz, «depurar responsabilidades políticas, y penales si las hubiera», y adecuar una dársena en el citado puerto para evitar vertidos en aguas abiertas.

El riesgo no se contrastó «objetivamente»

El informe elaborado por la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes Marítimos sobre las causas y circunstancias del suceso del Oleg Naydenov, con el objetivo de prevenir futuros accidentes, concluye que la decisión de sacar el buque pesquero de bandera rusa del Puerto de La Luz a la mar «es difícilmente evaluable en cuanto a su idoneidad» dadas las circunstancias en que se tomó.

Al respecto, el informe indica que la valoración de la escora, que motivó su remolque fuera de las instalaciones portuarias, «fue realizada de forma poco precisa» por el patrón del remolcador que suministraba el agua a los bomberos, ya que esa escora permaneció inconstante durante varias horas , en torno a los 15 grados, y por tanto las condiciones de riesgo no se habían incrementado.

Además, el agotamiento de los bomberos que intervinieron en el primer intento de sofoco del fuego en el interior del puerto, que no disponían de puesto de mando avanzado ni facilidades para su descanso, y las escasas perspectivas de éxito en la extinción «ayudaron a la decisión tomada por los responsables» de la emergencia.

Bomberos intentando apagar el incendio antes de que el barco se sacara del puerto. C7

Por si fuera poco, «los riesgos de explosiones y contaminación en caso de hundimiento no se contrastaron objetivamente» por lo ya expuesto y la precipitada salida al mar mediante remolque y su alejamiento de la costa impidió que se pudieran hacer estancas ni las tomas de mar ni los portillos situados en las proximidades de la línea de flotación, «lo que acabó facilitando el hundimiento» del buque.

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