Las serpientes reales recorren 62,5 metros entre uno y dos días

Publicado en la revista Scientific Reports por los investigadores Borja Maestresalas, Julien Piquet y Marta López, un artículo sobre la ecología espacial de la serpiente real de California (Lampropeltis californiae) que ha invadido Gran Canaria concluye que la distancia media de movimiento de esta especie es de 62,57 ± 62,62 metros en un periodo de entre uno y dos días.

Más en concreto, el estudio reveló movimiento, entendido como detecciones consecutivas con una separación mínima de seis metros, en el 31,68% de las 1.146 detecciones contabilizadas durante todo el período de seguimiento. Los movimientos detectados con mayor frecuencia fueron de longitud inferior a 100 metros (82,24%) y entre ellos el rango de 0 a 20 metros fue el más recurrente (27,03%).

El trabajo recientemente publicado concluye también que la actividad diaria de las culebras es mayor durante las horas centrales y vespertinas que durante las primeras horas de la mañana y la noche.

Asimismo, el estudio confirma que existe un período de inactividad general de la culebra, que no ha dejado de extenderse por la isla, que va de noviembre a febrero, siendo enero el mes menos activo del año.

Los autores del estudio monitorearon 15 individuos marcados con radiotransmisores una vez al día, entre nueve y once días al mes, desde julio de 2020 hasta junio de 2021, para calcular el área de distribución de la especie y describir los patrones de actividad anual en el área de la isla invadida.

Para tener en cuenta la actividad diaria de la especie durante el período de emergencia, además monitorearon las serpientes de enero a mayo de 2021, durante tres días consecutivos por mes, en cuatro intervalos de tiempo diferentes cada día.

Los resultados de este trabajo deberían ser útiles para mejorar los programas de control de esta serpiente invasora, por ejemplo para la colocación de trampas para su captura y para las actividades de inspección visual y la realización de batidas.

Los autores explican que el conocimiento sobre la ecología espacial de los depredadores invasores contribuye positivamente a optimizar su gestión, especialmente cuando se trata de especies crípticas y reservadas, como las serpientes.

Sin embargo, falta esta información para la mayoría de las serpientes invasoras, particularmente en las islas, donde se sabe que causan graves impactos ecológicos y socioeconómicos. De hecho, la serpiente real de California se ha convertido en el principal depredador de los lagartos endémicos de la isla, cuya población se ha reducido drásticamente por este motivo.

Tanto es así que el pasado mes de junio el lagarto gigante de Gran Canaria entró en peligro crítico de extinción y la lisa en situación de riesgo en la actualización anual de la Lista Roja de Especies Amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).

El lagarto gigante empeoró su situación, de especie con «precaución menor», el menor nivel de amenaza, al de «en peligro crítico», la peor clasificación antes de considerarse extinguido en estado salvaje.

A su vez, la lisa de Gran Canaria pasó del grupo de especies de «precaución menor» al de «en peligro», una amenaza ligeramente menor a la del lagarto gigante pero que también exigiría mayores medidas de protección para evitar su desaparición.

En ambos casos las poblaciones de estos reptiles se han reducido a la mitad en los últimos diez años, algo que los conservacionistas atribuyen a la acción de la culebra real de California, especie exótica invasora que llegó a la isla en 1998.

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