Santa Brígida decide cambiar el nombre de sus últimas calles franquistas
El Consejo Municipal de Patrimonio Histórico de la villa también aprobó llevar a cabo cuanto antes la modificación del Monumento a los Caídos
El Consejo Municipal de Patrimonio Histórico de Santa Brígida acordó este jueves cambiar la denominación de las últimas cuatro calles del municipio con nombres franquistas, que serán rebautizadas en la próxima sesión que celebre este órgano asesor, técnico y consultivo.
Las calles llamadas Fermín Barber, Defensores del Alcázar, Calvo Sotelo y Joaquín Monzón Barber recibirán otro nombre, para lo que se barajan figuras como la de Isidro Ezquerra Corrigüela, primer médico de Santa Brígida y bisabuelo del escritor Luis Junco, y María Teresa Prats de la Place, fundadora de la revista Mujeres en la isla y del Teatro Insular de Cámara.
La última calle franquista mencionada lleva el nombre del hombre que tomó a la fuerza el Ayuntamiento de Santa Brígida en 1936, detalla la concejala de Patrimonio y presidenta el Consejo, Avelina Fernández.
En aplicación de la Ley de Memoria Histórica, el Consejo también aprobó proceder cuanto antes a la modificación del Monumento a los Caídos que incluye la leyenda 'En memoria de los caídos en la guerra de liberación'. En su lugar se pondrá esta frase: «A la memoria de todas las personas que murieron a causa de la Guerra Civil Española». Además se añadirá una paloma de la paz de Pablo Picasso.
También en materia de memoria histórica, el Consejo decidió reiterar al Catastro la comunicación -que nunca recibió- de que desde 2006 ha cambiado el nombre de varias calles de la villa con nombres franquistas, calles que en las imágenes y datos del Catastro siguen figurando como Generalísimo Franco, Primo de Rivera o Alféreces Provisionales.
Medio milenio de parroquia
Por otro lado, el Consejo abordó la conmemoración del 500 aniversario de la Parroquia de Santa Brígida. La talla del Niño Jesús Indiano regresa temporalmente al municipio gracias a la gestión del cronista Pedro Socorro, a quien también se debe la restauración del cuadro de Ánimas, así como de las imágenes de La Dolorosa, San José y el Niño.
Quintana y Socorros proponen además recuperar el suelo original de la Iglesia y las lápidas que oculta.