San Bartolomé de Tirajana intensifica el control sobre las autocaravanas en párquines
Jesús Gallardo, portavoz de los autocaravanistas, denuncia una campaña de «persecución, acoso y derribo» a los vehículos-vivienda en el sur
El Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana ha intensificado el control sobre las autocaravanas que 'acampan' durante días en explanadas habilitadas para aparcar en zonas urbanas del municipio, tanto en barrios residenciales como en entornos turísticos. El concejal de Seguridad, José Carlos Álamo, explica que las mayores concentraciones se producen en Castillo del Romeral, en El Pajar y en calles de Playa del Inglés con poco tráfico, como, por ejemplo, la de Suiza y en el final de la Avenida de Bonn.
Esta decisión municipal ha encrespado los ánimos de algunos de los afectados, que han criticado duramente en redes sociales lo que entienden como un hostigamiento por parte de los policías locales. Los hay que aseguran que les han multado pese a que solo estacionaron su vehículo como uno más y mientras se daban un baño en una playa del municipio.
Esas quejas han llegado incluso a la Plataforma de Autocaravanas Autónoma (PACA), un colectivo de ámbito nacional pero con delegaciones en Canarias, cuyo presidente, Jesús Gallardo, denuncia una «campaña de persecución, acoso y derribo a los vehículos-vivienda en San Bartolomé de Tirajana». Visiblemente molesto, se mostró «indignado» por el «maltrato» que se da a los que disfrutan haciendo turismo en autocaravanas o en furgonetas camper.
Gallardo no oculta su desazón por las infructuosas conversaciones que ha mantenido hasta ahora, tanto con el alcalde, Marco Aurelio Pérez, como con el primer teniente de alcalde y socio de gobierno, Alejandro Marichal, para que este municipio habilite un terreno en el que puedan ubicarse los autocaravanistas.
Esta es, precisamente, la solución por la que apuesta Álamo, quien, en todo caso, deja claro que si los policías locales están actuando es porque han constatado que los vehículos han infringido de forma flagrante la normativa. Es más, advierte de las molestias que ya están causando este tipo de concentraciones en barrios como Castillo del Romeral, donde los vecinos se quejan de que se han llegado a juntar hasta 30 autocaravanistas y dueños de furgonetas camper, que ocupan explanadas para aparcar con sus sillas y mesas para celebrar asaderos cerca de la playa.
En todo caso, el concejal deja claro que tampoco han sido tantas las multas y que la institución se está limitando a hacer cumplir la normativa. Es más, le consta que algunos de los que han denunciado públicamente su malestar por la actuación de la policía llevaban varios días estacionados en un mismo sitio. Su apuesta, en la que dice que ya trabaja su gobierno, pasa por habilitarles un espacio propio.
«Borran con pintura negra las líneas de las plazas para aparcar»
El edil de Seguridad, José Carlos Álamo, reprocha también el comportamiento poco respetuoso con el espacio público por parte de algunos autocaravanistas. Señala como caso paradigmático el del dueño de uno de estos vehículos que llegó a borrar con pintura negra una de las líneas que delimitan las plazas de aparcamiento de la calle Suiza, en Playa del Inglés, para autodibujarse una plaza más grande en la que cupiera su autocaravana.