La primavera reverdece los montes de Gran Canaria

A vista de pájaro y desde el helicóptero de la Guardia Civil, la isla de Gran Canaria está hoy más verde de lo que lo estuvo en los últimos tres años gracias a las lluvias de las últimas semanas, en particular desde la entrada de una primavera que está siendo más húmeda de lo habitual. Hay agua en las charcas, estanques y balsas y el paso de la borrasca Olivier metió más de 670.000 metros cúbicos en las grandes presas.

Y el agua es vida. Para la naturaleza, que se fortalece, y para los cultivos, que crecen mejor. En el primer caso permite afrontar la próxima temporada de máximo riesgo de incendios forestales con menos combustible en los montes. En el segundo permite que los agricultores se ahorren el coste de algunos riegos y los ganaderos el de algunos piensos.

No le viene mal a una isla que viene sufriendo un déficit hídrico notable en sus recursos subterráneos, estimado en 127.000 metros cúbicos al día por la reducción de las lluvias y el incremento en las temperaturas.

No obstante, el año hidrológico en curso (de octubre pasado al próximo septiembre) está siendo, en general, muy seco en la provincia de Las Palmas, según el balance provisional de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Hasta marzo incluido, había llovido el 52% de lo que lo hizo en el periodo 1991-2020, solo 81,6 litros por metro cuadrado de media, siendo el décimo más seco desde 1961. Si el balance se hace sólo hasta el 3 de marzo la media acumulada en Gran Canaria sería menor, del 47%.

Y marzo fue lluvioso. Hubo precipitaciones apreciables (más de 0,1 litro por metro cuadrado) durante 23 de los 31 días en Valleseco y 20 en Osorio (Teror), con acumulados de 138 y 128,8 litros por metro cuadrado.

Esas fueron las mayores precipitaciones acumuladas del mes en la isla, pero no las más intensas. Esas tuvieron lugar a cotas más bajas y el mismo día, el 3 de marzo, durante el paso de la borrasca Nuria. En un hora cayeron 70,8 litros por metro cuadrado en Melenara (Telde) y 39,6 en Bañaderos (Arucas).

Marzo se caracterizó por la sucesiva llegada de borrascas atlánticas y DANAS al archipiélago, que dejaron precipitaciones durante la mayoría de los días en casi todas las estaciones de Canarias. Fueron de más volumen e intensidad y afectaron a una mayor extensión geográfica durante la primera mitad del mes.

Estas preciosas imágenes de la isla fueron captadas por el fotógrafo Arcadio Suárez gracias a la colaboración del helicóptero de la Unidad Aérea de Fuerteventura (UHEL Fuerteventura) de la Guardia Civil.

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