Crecen las protestas por el megafoco en Monte León

Indignación y sorpresa. Es la sensación que predomina en multitud de personas que estos días han ido a diferentes puntos de la isla para disfrutar de la Vía Láctea y se han encontrado con ese tremendo foco apuntando directamente al cielo e impidiendo cualquier fotografía o simplemente disfrutar del espectáculo.

Uno de ellos es el fotográfo Beni Aguiar, autor de la fotogafría que ilustra esta noticia, que lamenta que «es en estos días cuando mejor se puede ver la Vía Láctea y tenemos esa luz contaminando». El fin de semana pasado, Beni fue hasta Ayacata con su cámara para fotografiar el cielo cuando se encontró con la sorpresa. «El cielo estaba muy limpio y despejado, espectacular. Sobre las 23.00 horas de esa noche, esa luz apareció y lo estropeó todo. La encendieron y apagaron varias veces«, se queja Aguiar. Lo mismo le pasó el sábado, esta vez desde la Presa de las Niñas.

Un compañero suyo que se encontraba en La Aldea también la vio, para sorpresa de todos, dejando constancia de la potencia de ese haz de luz que está perjudicando en el peor momento, justo cuando llegan las perseidas.

Las autoridades ya están alertadas de la presencia de esta potente y misteriosa luz, que también afecta al turismo especializado que viene a Canarias a disfrutar de uno de los momentos más esperados del año para ellos, y se encuentran, desde cualquier punto de Gran Canaria, con esa contaminación lumínica.

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