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El acusado reconoció que convenció a la menor de que eran novios con el propósito de que le enviara fotos de ella de alto contenido sexualReconoció los hechos y fue condenado de conformidad a seis años y un día de cárcel por haber engañado a una niña de 11 años, a la que hizo creer que eran novios y que, cuando cumpliera la mayoría de edad, se iban a casar. Todo ello para que le enviara fotografías suyas de alto contenido sexual que luego compartiría en redes pedófilas. Por todo esto, fue penado por los un delito continuado de abuso sexual, otro de utilización de menores para pornografía y un tercero de distribución de pornografía infantil.
Los hechos que asumió un individuo que responde a las siglas J.E.D.O., están situados temporalmente en el segundo semestre de 2017. En esas fechas, el encausado, con antecedentes penales no computables a efectos de reincidencia, se valió de la confianza que tenía con la menor de 11 años de edad al ser amigo de su padre para hacerla creer que estaba enamorado de ella, que eran novios y que se casarían cuando cumpliera la mayoría de edad.
Esta estrategia la diseñó, presuntamente, con «ánimo de satisfacer sus deseos sexuales», sostiene esta parte, y lograr que la menor «le enviara desde su móvil, a través de la aplicación WhatsApp, fotografías con el torso desnudo, enseñando sus pechos», que almacenó en su móvil Samsung S7.
De la misma forma, cuando coincidían en la calle en Telde donde vivía la niña, «la besaba en la cara y en la boca, logrando en varias ocasiones, tocarle las nalgas, los pechos y la vagina» cuando ella iba a pasear al perro.
Como consecuencia de estos hechos, la menor fue ingresada en el servicio de Psiquiatría del Complejo Hospitalario Insular Materno Infantil, precisando de tratamiento psiquiátrico y psicológico. Según el informe psicológico forense aportado a la causa, la víctima presenta un «trastorno por estrés postraumático asociado a síntomas depresivos».
Asimismo, el encausado recibió y envió por WhatsApp «numerosos archivos con fotografías y vídeos de menores de edad en actitud y comportamiento sexuales explícitos de todo tipo, a solas y con hombres adultos, con penetraciones y felaciones».
Hay que destacar que el acusado acumula antecedentes penales al haber sido condenado en sentencia de fecha 9 de mayo de 2018, del Juzgado de Instrucción número 2 de Telde, por un delito de quebrantamiento de medida cautelar.
La pena impuesta por la autoridad judicial fue de cuatro meses de trabajos en beneficio de la comunidad y, por un delito leve de amenazas, 45 días de multa y la prohibición de aproximación y comunicación a la víctima.
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