Rescate del último rótulo de Maya: «Se ha evitado la pérdida de todo un icono comercial en Canarias»
La Asociación 'Cultura Insula Signa' anuncia que ha logrado evitar la desaparición de este elemento gráfico situado en la calle Juan Manuel Durán, en Las Palmas de Gran Canaria
La Asociación Cultural Insula Signa, dedicada a la defensa del patrimonio gráfico canario, anuncia en un comunicado que ha logrado «evitar la desaparición de todo un icono comercial» en las islas: el rótulo del último comercio del grupo de establecimientos Maya, situado en la calle Juan Manuel Durán de Las Palmas de Gran Canaria.
Con la preservación de este rótulo, perdura un símbolo de un pasado de «esplendor comercial» en el que cerca de un millar de establecimientos, conocidos popularmente como «los indios», contribuyeron al bullicio cosmopolita en las islas a mediados del siglo XX, según señala el colectivo cultural.
La historia Maya se remonta a finales del último siglo. Detalla el comunicado que significa 'ilusión' en sánscrito y era el nombre de una hija, fallecida a los 14 años, que tuvo el emprendedor Tirthdas Bherumal Bharwani, un joven nacido en Hyderabad Sind (región de la India que hoy pertenece a Pakistán), que abrió su primera tienda en la plaza de la Candelaria de Santa Cruz de Tenerife en 1953. Pocos años después abrió un centro de venta al mayor en Gran Canaria y en 1969 inauguró en la calle Triana su primera tienda en Gran Canaria.
Según la historia narrada por la Asociación Cultural Insula Singa, tras su muerte en 1977, sus hijos Ramesh, Kishinchand, Harisunder y Kumar tomaron el relevo. Ramesh transformó las prósperas tiendas de su padre en un imperio comercial que llegó a tener 2.000 empleados. La introducción de tarjetas de crédito propias supuso un «hito en la estrategia comercial, fidelizando a más de 25.000 clientes».
Ramesh creó una división internacional de importación y distribución mayorista de marcas de óptica, fotografía y electrónica. La tercera generación de la saga Bharwani chocó de frente con la crisis económica y una feroz competencia, que abocó a un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) y más tarde al cierre de todas las sucursales del grupo. El último establecimiento del grupo, en la calle Juan Manuel Durán de Las Palmas de Gran Canaria cerró definitivamente en el año 2016.
Noticia relacionada
Cajasiete rescata el emblemático edificio Maya
Legado hindú en Canarias
Insula Singa detalla que desde siempre, la posición estratégica de las Islas Canarias en las rutas marítimas a América y África atrajo a comerciantes no sólo europeos, sino de las áreas más lejanas del mundo. Entre estas comunidades destacaron los hindúes procedentes de la provincia de Sind, con capital en Hyderabad, que pasó a formar parte de Pakistán tras la ocupación británica de la India.
Tal y como recaban los datos del comunicado, la mayoría musulmana pakistaní dificultó a los hinduístas poseer tierras, integrarse en el ejército o acceder a títulos nobiliarios, por lo que vieron restringida su actividad al comercio. Los comerciantes sindhis se lanzaran a la búsqueda de puertos libres de restricciones y aranceles en todo el mundo.
Calificada por antropólogos e historiadores como «comunidad comercial diaspórica y casta comercial», el sindhi es el grupo de «origen asiático más antiguo establecido en España», según data el comunicado, sólo precedido en el tiempo por algunos libaneses instalados también en Canarias. Hoy en día es una compacta red de comunidades con presencia en más de cien países. El legado social y cultural de la comunidad hindú es notable aún hoy día en Canarias.
La asociación señala que la preservación de este rótulo, además de suponer un «valioso legado», ha sido posible a la «generosidad y sensibilidad hacia nuestro patrimonio cultural de los actuales propietarios del edificio».