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Vista de la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria. ARCADIO SUÁREZ

La presión fiscal se acentuó en 2024 un 9%: cada vecino pagó 665 euros, unos 54 euros más

La ciudadanía de Las Palmas de Gran Canaria se situó 25,3 euros por debajo de las previsiones presupuestarias que hizo el Ayuntamiento

Javier Darriba

Las Palmas de Gran Canaria

Lunes, 26 de mayo 2025, 02:00

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La presión fiscal que soportó la ciudadanía de Las Palmas de Gran Canaria en 2024 fue un 8,79% superior a la del año anterior. De acuerdo a los datos de la liquidación del presupuesto de 2024, que será aprobada en el pleno de este miércoles, cada ciudadano aportó a las arcas municipales un total de 665,27 euros, tanto en impuestos directos como en impuestos indirectos y tasas.

La cantidad que tuvieron que pagar los residentes de Las Palmas de Gran Canaria en 2024 es la mayor en los últimos años. Supera el listón que había fijado 2018, cuando la liquidación del presupuesto mostró que la presión fiscal de entonces se había situado en 628,78 euros.

Los 665,27 desembolsados por los contribuyentes de Las Palmas de Gran Canaria el año pasado suponen un aumento de 53,76 euros respecto al año 2023, lo que supone un incremento de casi el 9%, comparando las liquidaciones de las dos últimas cuentas.

Sin embargo, la cuantía recaudada por el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria en los tres capítulos de ingresos que conforman la presión fiscal se quedó algo por debajo de las previsiones iniciales que manejó el grupo de gobierno cuando presentó el presupuesto.

En efecto, las previsiones presupuestarias pasaban por una aportación individual de 690,57 euros, lo que supone un 3,8% más que lo se recaudó de manera efectiva cuando se cerró el documento de la liquidación de las cuentas del pasado año. En términos absolutos, cada vecino y vecina aportaron 25,3 euros menos que lo que había calculado el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria.

En total, el Consistorio capitalino ingresó 252 millones de euros de los 261,6 millones que confiaba recibir en concepto de impuestos y tasas. Esto indica un nivel de ejecución de estos tres capítulos de ingresos que alcanza el 96,34%.

Los impuestos indirectos y la actividad económica

Son los impuestos indirectos los que más crecen, hasta el punto de que superaron el presupuesto inicial y alcanzaron un nivel de ejecución del 103,5%. El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria esperaba recibir por impuestos indirectos un total de 89,03 millones de euros, pero finalmente consiguió una cantidad bastante superior, en concreto, 92,14 millones de euros, esto es, tres millones más.

El concejal de Hacienda del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, Francisco Hernández Spínola, justificó este aumento en el vigor económico que viven las islas ya que, entre otras partidas, los impuestos indirectos se nutren de las aportaciones que hace el Gobierno de Canarias por la recaudación del IGIC.

Esta fuente de ingresos que aporta la ciudadanía a través de sus compras se quedó en 72,8 millones de euros, lo que representa un incremento del 1,7% respecto a las previsiones iniciales pintadas en el presupuesto de Las Palmas de Gran Canaria, que había consignado 71,67 millones de euros.

En cuanto a los ingresos directos, supusieron un total de 136,56 millones de euros, con lo que se alcanzó casi el 99% de la cantidad presupuestada por el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, que fue de 138,24 millones de euros.

Los impuestos directos fueron la segunda fuente de financiación del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria el año pasado, solo por detrás de las transferencias corrientes, esto es, las aportaciones que hacen otras instituciones para financiar los gastos corrientes (no inversiones) del Consistorio capitalino. En este caso, se recaudó 202,9 millones de euros, un 98,63% de lo previsto inicialmente, que fue de 205,73 millones de euros.

En cuanto a las tasas, representan el menor porcentaje de liquidación. Solo se ingresó el 67,89% de los 34 millones de euros presupuestados, lo que supone un total de 23,3 millones.

Los tres capítulos de ingresos que estructuran la presión fiscal -impuestos directos e indirectos y tasas- suponen un 54% de todos los ingresos que tuvo el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria en el año 2024: fueron 252 millones de euros de los 465,65 millones recaudados.

La plusvalía se disparó un 256% el año pasado

Dentro de los epígrafes que conforman la presión fiscal, el de la plusvalía es de los que más destaca por su incremento. Respecto a las previsiones iniciales, supuso una aportación dineraria al Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria que creció un 256%. El Impuesto sobre el Incremento del Valor de los Terrenos de Naturaleza garantizó al Consistorio capitalino 10,76 millones de euros, cuando lo que esperaba la autoridad económica municipal era solo 4,2 millones de euros. Esta evolución refleja un aumento de las transmisiones de propiedades inmuebles, bien por compraventa, bien por donación en Las Palmas de Gran Canaria. De hecho, el presupuesto municipal de 2025 confía en mantener este nivel, ya que en las cuentas en vigor el impuesto de la plusvalía tiene consignada una partida de 10,5 millones de euros. En lo que respecta a las multas por infracción de la ordenanza de circulación, su nivel de ejecución se quedó solo en un 60,71%, al conseguir recaudar 5,77 millones de euros de los 9,5 millones que fueron previstos cuando se confección el presupuesto del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria. Las multas que se imponen por alteración de las normas de convivencia ciudadana, en cambio, presentan un nivel mayor de concreción. Alcanzaron algo más de un 79%: de los 756.000 euros previstos se recaudó 600.000 euros. En las partidas importantes de los impuestos directos, el de circulación fue el que mejor comportamiento registró al ingresar 14,8 millones de euros de los 15,12 millones de euros previsto. Esto supuso un nivel de ejecución de casi el 98%.

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