El Consistorio impulsa un plan de mejora del entorno de La Naval
Se reasfaltará la zona, más de diez años después, se profundizará en la limpieza y cambiarán los árboles actuales por adelfas
El Ayuntamiento aprobó ayer la propuesta del Partido Popular de impulsar un plan de mejora del entorno de la calle La Naval, donde el deterioro de los servicios públicos se apunta como una de las causas que explica el declive de esta zona comercial. Hay que tener en cuenta que, de acuerdo al análisis realizado por el Foro por La Isleta, un total de 145 negocios han cerrado en los últimos tiempos tanto en esta calle como en Juan Rejón.
Las medidas que se adoptarán en esta zona pasan por la mejora del asfaltado, ya que desde hace más de diez años no se renueva, pese a lo cual, la concejala de Servicios Públicos, Inmaculada Medina, aseguró que su situación es «aceptable». La edila recordó que la vida útil de las capas de asfalto suele ser de diez años.
Además, se cambiarán las luminarias, sustituyendo las farolas viejas por otras de bajo de consumo; y se plantarán adelfas una vez que se retiren los árboles actuales, que resultan «dañinos para las aceras y las fachadas».
Pese a que el acuerdo fue adoptado por unanimidad, el debate sobre el estado de la zona comercial Puerto-Canteras no estuvo exento de críticas. Así, Medina aseguró que «la muerte de Juan Rejón y La Naval fue en la etapa del alcalde José Manuel Soria, a quien se le advirtió de la situación que se estaba creando».
Ignacio Guerra (PP) le pidió que abandonase la labor de oposición desde su silla de gobierno, y le demandó que se pusiera «a trabajar desde este momento».
La portavoz de Ciudadanos, Lidia Cáceres, propuso aprovechar la oportunidades de negocio que traerá aparejado el taller de megayates para reactivar la zona. Y David Suárez (CC-UxGC) atribuyó los problemas de asfaltado a los problemas con el contrato.
Quejas vecinales en la obra de la calle Matías Padrón
El presidente de la comunidad de propietarios de la calle Matías Padrón 46, Iván Suárez, denunció ayer la falta de información en el proceso expropiatorio iniciado por el Ayuntamiento para la creación de un espacio libre entre las calles Carvajal y Pamochamoso.
«El edificio lleva dos meses temblando y hemos presentado más de veinte denuncias y nadie ha contestado», dijo el vecino, que fue interrumpido dos veces por el concejal de Urbanismo, Javier Doreste, por pasarse dos minutos del tiempo concedido, que era de cinco minutos.
El edil informó de que de las dieciséis propiedades afectadas por la expropiación, se han adquirido todas menos siete. Y de éstas, en tres hay ya acuerdo.
