El Ayuntamiento recauda hasta octubre 15 millones más en impuestos que en pandemia
Hasta el día 12, el consistorio ha ingresado ya 98,97 millones de euros
Los contribuyentes municipales han aportado ya a las arcas municipales casi cien millones de euros en concepto de impuestos y tasas. Hasta el 12 de octubre, y con los datos aportados en la comisión de Gestión Económico-Financiera por el coordinador general de Economía y Hacienda, Antonio Ramón Balmaseda, el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha recaudado un total de 98,97 millones de euros.
Esta cantidad supone medio millón de euros más que lo que ingresado en 2021 (con todo el mes de octubre contabilizado) y unos 15 millones de euros más que en 2020.
Por grandes conceptos, los recibos sometidos a un padrón fijo, como el catastro, son los que más dinero han reportado, con un total de 60,98 millones de euros; las liquidaciones de tasas, las multas y el impuesto de construcciones han generado 12,31 millones de euros; las autoliquidaciones que tienen que pagar los ciudadanos, como cuando expiden un documento, han supuesto 4,86 millones de euros; y la vía ejecutiva, esto es, cuando se imponen recargos y se cobra intereses por no pagar a tiempo, un total de 20,71 millones de euros.
En los presupuestos, el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria había previsto una recaudación por impuestos y tasas de 222,54 millones de euros. Lo ingresado hasta ahora cubre un 44,5% de las expectativas iniciales.
Pago del Impuesto de Bienes Inmuebles
La comparecencia de Balmaseda, hecha a petición del PP, fue aprovechada por el edil de esta formación Víctor Moreno, para criticar que en verano se eliminara la modalidad de pago del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) sin avisar a los contribuyentes.
«Esto hará que 8.852 contribuyentes, que en el pasado optaron por pago fraccionado, vean ahora cómo se carga, en su cuenta, un cobro único por la totalidad del importe que venían pagando en varios meses, y además perderán el derecho a la bonificación», denunció.
El edil considera «inaceptable que este pago sea afrontado por las familias en plena escalada de precios, con una cesta de la compra desbocada que merma el bolsillo de cada vecino. Lo último que necesita el contribuyente es un sablazo más que puede superar los 1.000 euros y que es apenas unas semanas antes de navidades».
Por último, Moreno acusó al alcalde de la ciudad, Augusto Hidalgo, de mentir «al afirmar que las personas que tenían la modalidad a 6 meses verían modificado de modo automático a 10 meses».
Una sola modalidad de pago
Balmaseda justificó la decisión de dejar solo una modalidad de pago fraccionado del IBI a diez meses porque el que se eliminó complicaba la tramitación del impuesto. «Recaudación entendió que esa modalidad generaba complicaciones porque cuando se devolvía un pago complicaba el siguiente cobro y se pensó que debíamos tener una sola modalidad d pago fraccionado y quitar las otras», expuso.
Dijo que nunca hubo ninguna intención de causar perjuicio a los contribuyentes, pero defendió que todos los ciudadanos debían estar informados porque en su momento, y como todos los años, se publicó el calendario tributario y, además, se notificó a través de los medios de comunicación del cambio en la modalidad de pago.
A ello hay que añadir que también hubo información directa a contribuyentes de los que se disponía de la información relativa a su móvil o correo electrónicos. En este caso, se enviaron 3.200 correos electrónicos y 2.600 SMS para informar de la modificación.
A partir de aquí, Balmaseda se dirigió a la comisión como funcionario municipal y no como coordinador de Hacienda, e hizo una llamada a la responsabilidad de los ciudadanos para cumplir con sus obligaciones fiscales de naturaleza municipal.
«Como jefe de servicio de tributos, hacemos lo posible para que los contribuyentes paguen, pero también tenemos la sensación de que el contribuyente municipal parece que es menor de edad y si no le decimos a cada paso lo que tiene que hacer, considera que no tiene que cumplir su obligación», lamentó.
«A todo el mundo se le pasa pagar el IBI»
«A nadie se le esconde que cuando llega el mes de abril todos tenemos que presentar el IRPF. Sé que no podemos competir con la administración general del Estado, pero a nadie se le pasa pagar el IRPF, y aquí a todo el mundo se le pasa pagar el IBI», prosiguió, «parece que estar tutelando permanentemente a los contribuyentes va en contra de una política fiscal responsable. Y aquí hablo como técnico, la política responsable tiene que ser por ambas partes, la administración pone todos los medios para garantizar el cumplimiento, pero los ciudadanos tienen que ser mayores de edad en sus obligaciones tributarias».
El jefe de Tributos entiende que «cuando (los ciudadanos) se relacionan con el Ayuntamiento, somos una administración tributaria de carácter menor y que las deudas del ayuntamiento pueden escapar o pasar, pero tienen las mismas garantías y privilegios que las del Estado o la Comunidad Autónoma, en las que nadie escamotea nada y se cumplen con puntualidad».
Por eso, con independencia de qué partido gobierna, planteó la necesidad de «corresponsabilizar a los ciudadanos de sus obligaciones tributarias y no estar tutelándolos permanentemente y lo digo como funcionario, me da igual que gobierne A o B».
