Unos 20.000 coches se suman este lunes a las vías de la capital
El Ayuntamiento calcula que el tráfico se incrementa en torno a un 30% respecto a los valores habituales registrados en verano
Mucha paciencia y seguir las recomendaciones de los policías locales y de los agentes de movilidad. Los dos consejos serán vitales para no perder la paciencia este lunes, cuando se produzca la vuelta al cole y al trabajo, y las vías de la ciudad recuperen la normalidad. Desde el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria se calcula que el volumen circulatorio a partir del lunes crecerá en torno a un 30% respecto a los niveles de tráfico del pasado verano. En la práctica, esto supone que se incorporarán a la red viaria entre 15.000 y 20.000 vehículos.
Es cierto que el coche particular ha ido perdiendo terreno respecto a otros modos de movilidad más sostenibles. Pero aunque en la actualidad el vehículo privado solo representa el 49% de los desplazamientos que se producen al día en la ciudad (hace una década eran el 67%), la situación de algunas de las vías de la capital están ya al borde de la congestión permanente.
Hay que recordar que, de acuerdo al índice de congestión que publica TomTom, nuestra ciudad es la decimoctava de España con peores niveles de circulación. Nuestros conductores necesitan emplear unos 13 minutos de promedio para cubrir una distancia de 10 kilómetros, lo que supone cinco minutos menos que lo se requiere en las dos ciudades españolas más congestionadas, esto es, Madrid y Barcelona.
En estas circunstancias, la incorporación de un gran número de guaguas escolares, la costumbre de llegar en coche hasta la puerta de los colegios que tenemos los padres y la coincidencia de obras importantes en el entorno de los centros educativos puede acabar por convertir este día en un lunes negro para la circulación.
El Ayuntamiento dio a conocer esta semana un dispositivo especial de tráfico que ha sido llamado 'Vuelta al Cole 2023' que trata de reducir la incidencia que tiene en el tráfico el regreso a las aulas y la incorporación a pleno rendimiento de las plantillas en sus puestos de trabajo tras la festividad de la Virgen del Pino.
La atención principal se prestará en los centros escolares. De acuerdo a los datos que maneja la Consejería de Educación del Gobierno de Canarias, en nuestra ciudad existen 136 colegios públicos, 37 concertados y 52 privados, así como los tres campus de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) en Tafira, el Obelisco y San Cristóbal.
En los colegios se prestará una atención especial a los puntos conocidos como 'Besa y Baja', los espacios habilitados para que padres y madres dejen a sus niños y niñas sin entorpecer el tráfico. Aquí lo que se vigilará es que las paradas sean de corta duración y no se conviertan en estacionamientos.
Lógicamente, no se puede poner un agente de la Policía Local o de movilidad en todos y cada uno de los centros educativos para regular el tráfico.
Por eso, el dispositivo de tráfico prestará una atención preferente a unas 18 zonas en las que se acumulan varios colegios, así como en los accesos principales y aquellos en los que el acceso pueda resultar más problemático por la cercanía de obras.
Atención preferente
En la nota de prensa difundida por el Consistorio capitalino se informaba de que «los agentes estarán desplegados desde las 07.00 horas y hasta las 09.15 horas en tramos estratégicos como la Rotonda de Torre Las Palmas, el cruce de la Avenida de Primero de Mayo con la Bajada de Mata, calle de Tomás Morales, glorieta de acceso a Miller Bajo, La Paterna y Casablanca III desde la autovía GC-3, rotonda de la Base Naval, el tramo de la calle León y Castillo que va de Juan XXIII a Bravo Murillo y el acceso a la Avenida Marítima desde Juan XXIII».
«Otros puntos en los que se reforzará la regulación debido a su densidad de tráfico serán las rotondas de Belén María del Puerto, Hoya de La Plata en el Cono Sur, Lomo de los Frailes y La Ballena. Asimismo, se actuará en los tramos donde se estén desarrollando obras cercanas a centros escolares como la calle General Bravo, la vía de servicio de la Avenida Marítima a la altura de la Fuente Luminosa, plaza de Las Américas, calle Fernando Guanarteme, entorno del Parque de Santa Catalina, Mercado del Puerto, plaza Ingeniero Manuel Becerra y carretera de Los Tarahales».
Los policías piden la colaboración de los conductores, sobre todo en estos primeros días de semana. «El tráfico va a ser complicado porque la circulación en el istmo está dificultada por las obras de la MetroGuagua, porque Julio Luengo mantendrá su nivel habitual de congestión y por los problemas que habrá en los colegios», explica David Salazar, representante de la Unión Sindical de Policías y Bomberos (USPB), «hay bastante obras nuevas y la gente no va a estar todavía muy acostumbrada a los cambios que suponen de cara a la circulación».
Falta de policías
A ello hay que añadir las carencias de personal que tiene el cuerpo de la Policía Local, que en los últimos veinte años ha perdido más de un centenar de efectivos. «Tenemos unas 140 plazas vacantes», recuerda, «con una oposición para cubrir 45 plazas que lleva un año parada».
Por eso, apunta el representante de USPB, se podrán producir retrasos puntuales en el tiempo de respuesta ante otros incidentes.
Transporte público
Para los taxistas, el lunes también resultará complicado. Ellos apuntan como principal punto negro añadido al listado de congestiones tradicionales el del entorno de Primero de Mayo. «Ahí va a haber un colapso diario», expone el presidente de la Asociación de Trabajadores Autónomos del Taxi (ATAT), Jean Charles Chabot, quien asegura que el tráfico se ha empezado a complicar ya en los primeros días del mes de septiembre.
Para este colectivo, los atascos no son buena noticia ya que las congestiones disuaden a los clientes del taxi del uso del servicio. «Si una carrera normal cuesta cinco o seis euros, cuando hay atasco puede llegar a los diez euros y ese cliente ya no coge más el taxi», advierte.
Por otro lado, Guaguas Municipales retomará el lunes los servicios habituales al campus universitario de Tafira con las líneas 25, 26, 48 y 7.
