Juan Manuel Pérez: «El nombramiento del comisario se hizo con nocturnidad»

Juan Manuel Pérez León, que denunció al ahora exalcalde de San Bartolomé de Tirajana, Marco Aurelio Pérez por prevaricar presuntamente en el nombramiento de Isidro Armas como comisario, declaró ante el juez que la adjudicación del cargo se hizo de forma «irregular» y con «nocturnidad», manifestó.

Esta causa, investigada por el Juzgado de Instrucción número 2 de San Bartolomé de Tirajana, estudia la denuncia presentada por la Fiscalía por un presunto delito de prevaricación cometido entre 2013 y 2016 al nombrar como comisario de la policía local al policía nacional Isidro Armas mediante una comisión de servicios cuando la normativa establece que ha de hacerse vía promoción interna, entre otros policías locales subcomisarios y en activo.

El denunciante declaró ante la autoridad judicial que hubo «irregularidades tanto en la comisión de servicios como en los posteriores» y que la ilegalidad estaba «en que el señor fue nombrado en comisión de servicio cuando el mismo pertenecía al CNP y por eso no era posible dicho nombramiento, además de que Isidro era diplomado y no licenciado, por lo que no cumplía con los requisitos académicos necesarios para ocupar dicha plaza».

Insistió ante el juez que «la toma de posesión se hizo en un pleno irregular en el que no hubo publicidad ni convocatoria en el BOE y la oposición se opuso a dicho nombramiento cuando solo habían pasado 45 días desde que se había nombrado a un subcomisario». Además relató que «por las presiones recibidas por los recursos interpuestos por sindicatos y distintos jefes de policía, cesó a Isidro pero lo nombró jefe del área de seguridad y con retribución como A1».

Por último, detalló que del nombramiento a la toma de posesión deben de haber unos «requisitos mínimos con 1.200 horas de prácticas, un curso de seguridad de la Policía Canaria, además de los requisitos académicos. Para el cumplimiento de las horas mínimas, pusieron a un comisario de Las Palmas y otro de Tenerife cuando aquí había un subcomisario y un sargento que podían probar que cumplía con las horas», manifestó.