El Equipo Pegaso vigilará el uso de drones en la Bajada de la Virgen
Operativo especial ·
Esta unidad de la Guardia Civil controlará que no haya aeronaves volando sin autorización y que pueden crear un riesgo a los asistentes al evento
La Guardia Civil se prepara de forma intensa para la esperada Bajada de la Virgen del Pino, que comenzará este sábado, 31 de mayo, en la Basílica de Teror. La peregrinación, enmarcada dentro del Año Jubilar 2025, bajo el lema 'Camino de Esperanza', será vigilada de cerca por efectivos del Instituto Armado, entre los que tendrá un especial protagonismo el Equipo Pegaso, cuyas siglas significan Policía Especialista en Gestión Aeronáutica y Seguridad Operacional. Sus agentes serán los encargados de velar por la seguridad de este multitudinario evento desde el aire, haciendo especial hincapié en el posible uso sin autorización de drones durante el recorrido, que pueden generar un peligro al dispositivo especial organizado para esta histórica cita.
Su responsable en la provincia de Las Palmas, el sargento primero Lorenzo Negrín, detalló a este periódico el dispositivo especial que el Equipo Pegaso va a desplegar, no solo en Teror, sino durante las diferentes fases del recorrido en las que la competencia la asuma la Benemérita. «Llevaremos a cabo una escolta a la Virgen del Pino y su comitiva, tanto desde tierra como desde el aire. En compañía de la Usecic (Unidad de Seguridad Ciudadana de la Comandancia), estaremos desplegados en distintos lugares para detectar y evitar que haya vuelos no autorizados de drones», comentó el suboficial.
Con carácter preventivo, la Guardia Civil ha emitido un Notam (Notice To Airmen), es decir, un aviso al resto de posibles usuarios del espacio aéreo de la zona comprendida en Teror y sus inmediaciones, de que el vuelo de aeronaves está restringido a aquellas que estén debidamente autorizadas: drones estatales, de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y de los servicios de emergencia. «Se ha hecho una restricción del espacio aéreo de Teror, y quien tenga una justificación y permiso para volar va a poder hacerlo, pero hay que dejar claro que ese día van a estar restringidos los vuelos para aeronaves que no estén autorizadas específicamente».
Y todo ello, para garantizar la seguridad de la comitiva, que puede verse comprometida con el vuelo de drones que no estén identificados y cuenten con la debida autorización. «El uso de este tipo de aeronaves puede generar algún tipo de peligro en eventos como este, en los que se aglutinan miles de personas. Por eso extremamos la precaución y advertimos al ciudadano que su uso está restringido», comentó el sargento primero Lorenzo Negrín. Además, señaló que el trabajo del Equipo Pegaso en esta Bajada de la Virgen del Pino se centrará en el primer traslado de la imagen desde la Basílica de Teror hasta la Catedral, el día 3; cuando la lleven hasta Santa Lucía de Tirajana; y el 15, que regresa otra vez a su hogar, en el municipio de las Medianías.
Con sede en Gando
El Equipo Pegaso está encuadrado dentro del Servicio Fiscal y Fronteras de la Guardia Civil, con sede provincial en el Aeropuerto de Gran Canaria, y se encarga de la aviación general, aviación ligera, aviación deportiva y de los UAS, o más comúnmente conocidos como drones. También, entre otras cosas, controlan disciplinas como el aeromodelismo; se encargan de la vigilancia y protección de las instalaciones aeronáuticas o campos de vuelo, y asumen la reacción inmediata ante cualquier emergencia, a petición de otras unidades que requieran de su apoyo o asesoramiento. «Controlamos, entre otros, los eventos donde puede haber drones no autorizados, unas aeronaves tripuladas que han proliferado muchísimo en los últimos años y que, en ocasiones, no respetan la normativa», explicó el responsable de Pegaso.
Sin ir más lejos, en fechas recientes trabajaron de forma intensa en el dispositivo de seguridad del mundialista Rally Islas Canarias, un operativo en el que llegaron a detectar varios drones volando sin autorización, con el consiguiente riesgo, entre otros, para los helicópteros que estaban realizando un seguimiento a los pilotos en los tramos.
Para desempeñar su labor, el Equipo Pegaso cuenta con tecnología como apoyos visuales en forma de prismáticos o un intensificador de luz de visión nocturna, y el importantísimo Aeroscope, que es un aparato capaz de detectar, mediante las frecuencias, dónde se encuentra el dron y el piloto que lo maneja. «A partir de que hayamos detectado el aparato, el Aeroscope nos da información sobre el propio dron, sus características, el vuelo que está realizando y, lo más importante, dónde se encuentra el piloto. Si no es una persona que está autorizada, procederemos a localizarlo e interceptarlo», cuenta el sargento primero.
En caso de que esta operación no sea exitosa en primera instancia, y la aeronave siga constituyendo un peligro, los agentes cuentan con un fusil inhibidor que neutraliza la señal del aparato. «Después, según cómo esté programado, nosotros seríamos capaces de llegar a controlar el dispositivo, hacer que regrese al lugar donde despegó o que aterrice».
Pero esta unidad especializada del Instituto Armado no solo opera en eventos y controlando espacios e instalaciones aeronáuticas, también desarrolla operativos en enclaves como enclaves naturales de las islas, en los que los vuelos están restringidos; en aquellos en los pueden afectar a la avifauna, o los que se pueden realizar sobre zonas urbanas. Todo ello, con el objetivo de «proteger a las personas, instalaciones y espacios especialmente sensibles por seguridad y los rincones naturales protegidos de la provincia».
