Los dueños de motos de agua protestan por el cierre del acceso al mar en Puerto de Mogán
Pesca ha asumido la parte pesquera del recinto y en breve le pasará la gestión a la cofradía, que no piensa habilitar la rampa cerrada
Los dueños de motos de agua y otro tipo de embarcaciones de recreo que entraban al mar por el puerto de Mogán denuncian que desde hace meses, desde mediados de 2022, se les ha bloqueado la rampa de acceso que estaba habilitada en esas instalaciones portuarias. Se quejan porque el recinto más cercano al que les remiten es el de Pasito Blanco, en San Bartolomé de Tirajana.
«No entendemos nada, de repente nos plantan unas vallas y un candado donde está la rampa, sin más información ni más nada, y cuando preguntamos se limitan a echarse las culpas entre Puertos Canarios y Pesca del Gobierno de Canarias», protesta uno de los afectados, que prefiere no revelar su identidad. Para colmo, les molesta que a muchos les haya dejado con las tasas y los tiques de entrada y salida abonados. «Es un servicio al que tenemos derecho y por el que hemos pagado y, sin embargo, lo clausuran».
Uno de los denunciantes critica incluso que en su caso le forzaron a tener que recurrir a una grúa para poder sacar la moto de agua que había dejado en la lámina de mar del puerto moganero. Como no había manera de que le desbloquearan la rampa, tuvo que desembolsar 150 euros en alquilar un camión para ese fin.
La clave del cierre de este acceso tiene que ver con un traspaso en la gestión de esas instalaciones desde la entidad pública empresarial Puertos Canarios, que depende del Gobierno regional, a la Consejería de Agricultura, Ganadería y Pesca de ese mismo ejecutivo autonómico. Esta cesión se fraguó mediante un convenio entre ambas partes en septiembre de 2021 y que está en vigor desde un mes después.
La actividad pesquera tendrá prioridad
El director general de Pesca del Gobierno de Canarias, Carmelo Dorta, explica que las instalaciones cedidas son las que tienen que ver con la actividad pesquera y que con esta transferencia en la gestión lo que se ha pretendido es dar prioridad en el uso de esas instalaciones a las actividades relacionadas con la pesca, tanto la artesanal como la deportiva. La decisión no prohíbe su uso por otro tipo de embarcaciones, pero sí las supedita a las necesidades que demande la actividad pesquera.
Dorta añade que la pretensión de la consejería pasa ahora por traspasar a su vez esa gestión a las propias cofradías y cooperativas, trámite que, no obstante, aún no se ha llevado a cabo. Quieren cumplimentarlo antes de que acaba el mandato. Eso explica, entre otras cosas, el cierre de la rampa del puerto de Mogán, pendiente de que Pesca le pase a la cofradía su gestión.
Desde Puertos Canarios sostienen que en principio los usuarios de motos de agua recuperarán su acceso al mar, pero que deberán someterse a los horarios que les fije Pesca, o en su caso, la cofradía. Sin embargo, este colectivo ya deja claro que no tiene intención de habilitarlo, según admite el secretario de la cofradía, Miguel Ángel Delgado, porque, entre otras cosas, y de entrada, no usan la rampa.
