Agüimes negocia con Infecar para que asuma la gestión del recinto ferial
La obra está acabada en un 95%, pero faltan por ejecutar dos modificados que aumentarán el coste del proyecto en unos 200.000 euros
El Ayuntamiento de Agüimes negocia con la Institución Ferial de Canarias (Infecar) que sea este organismo, enteramente público y dependiente del Cabildo, quien asuma la gestión y explotación del recinto ferial que está a punto de acabarse en el Cruce de Arinaga. En el caso de que lleguen a buen puerto las conversaciones, Infecar contaría con una extensión en el sureste-sur de la isla. Sería la primera vez que esta institución dispondría de dependencias fuera de las que tiene en la capital, en La Feria del Atlántico.
El alcalde, Óscar Hernández, apunta que el acuerdo no está cerrado, aunque a priori Infecar ha visto la propuesta con muy buenos ojos. Por lo pronto, informa de que la institución ferial ha encargado un estudio económico para analizar la viabilidad de esta operación, que se fraguaría mediante un convenio entre las partes. Por el momento, asegura que no se ha entrado en mayores detalles. La idea es que Infecar asuma su gestión, mantenimiento y vigilancia a cambio de explotarlo.
Cuando se anunció la construcción de este edificio, el Ayuntamiento apuntó que serviría para acoger un mercado agrícola municipal. Según Hernández, este hipotético acuerdo con Infecar no tendría por qué modificar esa hoja de ruta inicial. Los puesteros podrían instalarse una vez a la semana o cada quince días. Además, aclara el alcalde, «desgraciadamente la demanda actual para estos puestos no es tan alta». Cita ejemplos de otros municipios que en pocos años han perdido el 30 o el 40% de los que empezaron con el mercado.
Pero al margen de que Infecar asuma o no la gestión del recinto, el Ayuntamiento tendrá que acabarlo. Y para ello deberá salvar el enésimo escollo que se le ha atravesado con una obra que inició en 2014 y que ya le ha deparado sustos que han retrasado varios años su finalización. El último obstáculo llega en forma de dos modificados de proyectos. Uno ya fue aprobado esta semana por la Junta de Gobierno, y el otro está en redacción.
El primero, presupuestado en 96.000 euros, tiene que ver con un reformado en la instalación eléctrica, que incluirá la colocación de un nuevo cable entre la estación transformadora y el recinto ferial. Y el segundo buscará reforzar las zapatas sobre las que se apoya la cubierta. Colocada la estructura, el Ayuntamiento pidió 'recalcular' su seguridad y los técnicos aconsejaron reforzar sus apoyos para evitar que por su forma ovalada favorezca un efecto vela en caso de fuertes vientos. Tendrá un coste de entre 110.000 y 120.000 euros. Ambos proyectos podrán ejecutarlos las actuales concesionarias porque cuando fueron contratadas no había entrado en vigor la nueva Ley de Contratos. Según Efraín González, edil de Obras, la obra está ejecutada en un 95% y estos dos modificados podrían estar listos antes incluso del verano.
El alcalde dice que, si sale el acuerdo con Infecar, podría empezar a funcionar en 2022. Se culminaría así un proyecto adjudicado en 2013, pero que pronto sufrió un serio traspiés por discrepancias con la primera concesionaria, Dragados. Agüimes logró resolverle el contrato y reiniciar las obras en 2017, pero su coste se ha elevado de los 3,8 millones inicialmente presupuestados a 5,3, sumados estos 200.000 más de ahora. Lo han financiado Ayuntamiento, Cabildo y Gobierno central. De forma oval y una superficie de 6.000 metros cuadrados, su techo es una estructura de metal que irá cubierta con chapa.