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La oferta de la UTE que constituirán las empresas Sociedad de Ingenería-Servicios del Territorio y Medio Ambiente, Estudio 7 y Evalúa Soluciones Ambientales es la ganadora del concurso para la redacción de los proyectos de trazado y construcción del desdoblamiento de la carretera del norte entre Bañaderos y El Pagador.
La Mesa de Contratación de la Consejería de Obras Públicas del Gobierno canario ha decidido que es la mejor oferta de las cinco barajadas para elaborar el proyecto que acabe con el principal embudo viario del norte, el tramo entre Arucas y Moya con la velocidad limitada a un máximo de 50 km/h por el que circulan a diario una media de 33.060 vehículos.
Una vez firmado el contrato, con un presupuesto de 581.000 euros, la UTE tendrá 17 meses para entregar los documentos que permitan licitar la ejecución de la GC-2 entre Bañaderos y El Pagador, una carretera completamente nueva de dos carriles por sentido entre la vía actual y el acantilado que cierra la plataforma costera.
Su puesta en servicio permitirá que la carretera actual, también de dos carriles por sentido, se reconvierta en un eje verde estructurante que, de este a oeste, unirá los núcleos de Quintanilla, San Andrés, El Altillo y El Roque.
El nuevo trazado, que debe ajustarse a los criterios establecidos en el Plan Territorial Parcial del Litoral del Norte (PTP-15) elaborado por el Cabildo, discurriría al aire libre porque ese documento descarta los túneles que reclamaba el Consistorio de Moya para el tramo que pasa por su costa.
No obstante, este ayuntamiento ha recurrido el PTP-15 ante el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) en contra del trazado propuesto y otras determinaciones, como las relativas a la reubicación de las viviendas situadas en dominio público marítimo-terrestre. También el de Arucas ha acudido a los tribunales en desacuerdo con varias medidas previstas en ese planeamiento.
Para el trazado de la futura carretera, el PTP-15 también propone la creación de dos pasos elevados a la altura del nuevo enlace de Bañaderos, dos pasos subterráneos y dos pequeños viaductos, uno en Bañaderos y otro al cruzar el barranco de Azuaje.
Además, establece la necesidad de ensanchar para ganar carriles el actual corredor entre los núcleos de Bañaderos y El Puertillo, así como la conversión en enlace de la rotonda de Bañaderos y la introducción de un nuevo enlace en San Andrés.
Será el proyecto de construcción el que determine la solución para el tramo que divide Bañaderos y El Puertillo, en el que queda abierta la posibilidad de soterrar la carretera para que deje de ser una barrera física y visual entre ambos núcleos de Arucas.
El consejero de Obras Públicas del Gobierno de Canarias, Pablo Rodríguez, prometió a los alcaldes de Arucas y Moya reuniones de trabajo para valorar sus propuestas cuando se adjudique el contrato de redacción del proyecto de trazado y construcción para intentar desjudicializar el diseño de la nueva carretera.
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