Muere Luz Marina, la guardiana de los saberes populares de Fuerteventura
Obituario ·
La escritora, viajera y animadora sociocultural nacida en Chilegua publicó varios libros sobre las costumbres de una isla que dejó atrás cuando emigró de adolescente a Gran Canaria a trabajar en el cultivo del tomate. En 1989, regresó a Fuerteventura para trabajar para el Cabildo y los ayuntamientos de Betancuria y Antigua, recogiendo las costumbres que le relataban los mayoresEl saber popular de las hierbas medicinales, el trabajo en los tomateros y el vuelo de las mariposas monarca se han quedado sin su principal defensora y recopiladora, Luz Marina Padilla Ruiz (Chilegua, Pájara, 1963).
En sus charlas, talleres, libros y vida, esta majorera evocaba el mundo que dejó atrás en su Chilegua natal de infusiones, ungüentos, leyendas, años ruines, cantares de las pionás y rezaos contra el mal de ojo, más el que se encontró en Gran Canaria cuando, de adolescente, emigró para trabajar en la zafra del tomate.
Luz Marina escuchaba a los mayores y apuntaba, para luego convertir en libros que el acebuche ayuda contra el dolor de garganta, el hinojo es bueno contra el mal de estómago y con la aulaga se hacían en otros tiempos infusiones para combatir la ictericia. No todo fue saber popular sino que también denunció en sus textos las condiciones laborales de las mujeres en las zafras del tomate.
Cuando en 1989 volvió a su Fuerteventura natal, trabajó para el Cabildo y los ayuntamientos de Antigua y Betancuria este último le publicó varios libros sobre etnografía, con los mayores. La Maxorata que la recibió había cambiado, pero ella se empeñó en dejar constancia aquel saber popular que ahora se ha quedado huérfano.