Secciones
Servicios
Destacamos
Necesitas ser registrado para acceder a esta funcionalidad.
Opciones para compartir
Dialogante «hasta la extenuación o el aburrimiento», cercano, empático, con mucha «cintura política», experiencia en la gestión... El secretario general del PSOE canario, Ángel Víctor Torres, reúne consenso en los calificativos que recibe tanto de compañeros de partido como de adversarios políticos.
Son adjetivos que ha ido cosechando a lo largo de los últimos 25 años, desde que en 1999 ocupara su primer cargo como concejal en la oposición del Ayuntamiento de Arucas hasta hoy, que recibirá la cartera de ministro de Política Territorial y Memoria Democrática.
La carrera política de este profesor de Secundaria licenciado en Filología Hispánica no ha sido fulgurante ni forjada a golpe de suerte. Su trayectoria le define. Meticuloso, concienzudo, una persona que no toma las decisiones a la primera y, sobre todo, de talante negociador. Lo que no le resta determinación.
Así lo demostró en los cuatro años en que estuvo al frente del Gobierno de Canarias (2019-2023), quizá los más difíciles que ha tenido que afrontar hasta ahora la comunidad autónoma, un tiempo en los que tuvo que gestionar una pandemia, un cero turístico o la erupción de un volcán. Y todo ello con un Ejecutivo de cuatro fuerzas políticas, el primero de la historia del archipiélago, y el segundo que completó la legislatura.
Torres conoce todos los niveles de la administración canaria desde el Gobierno y desde la oposición. En Arucas estuvo a uno y otro lado del poder y en 2009 compatibilizó su cargo como teniente de alcalde con la de diputado nacional.
Valora el trabajo que hacen alcaldes y concejales como gestores más cercanos a la ciudadanía. De ahí la referencia en su debate de investidura como presidente de Canarias señalando que quería un Gobierno que funcionara como un ayuntamiento de las ocho islas.
En su recorrido al frente del partido en Gran Canaria -de 2010 a 2017- sustentó su poder en las agrupaciones locales. Su único momento de 'rebelión' conocido dentro del partido fue como líder del movimiento Dando la cara, en el que acompañó a los dirigentes locales contra la política de su antecesor, José Miguel Pérez, para que el municipalismo estuviera mejor representado en los órganos de dirección del PSOE.
Desde ese momento, parte de su núcleo duro procede de las agrupaciones locales. Como líder insular, fue el cabeza de lista al Cabildo de Gran Canaria en 2015, institución de la que fue vicepresidente, además de estar al frente de Obras Públicas y Deportes.
En 2017, Torres dio un paso al frente y se presentó a las primarias para dirigir el PSOE en Canarias, en ese momento liderado por una gestora tras la dimisión de Pérez. Se enfrentó a Patricia Hernández y Juan Fernando López Aguilar, a los que se impuso.
En su ejecutiva primó el equilibrio territorial frente a las tradicionales familias y, aunque heredó un partido con una gran bronca interna, lo hizo a su mano y ganó dos elecciones autonómicas.
En su debate de investidura como presidente, en 2019, quedó reflejada la impronta con la que quería dirigir su Gobierno y que, con toda seguridad mantendrá en esta nueva etapa de negociación con las comunidades autónomas: tendiendo la mano a la negociación y a la participación de todos pero, tal como dejó claro en aquel momento- sin miedo a la hora de batirse en el terrero político. Quizá Pedro Sánchez lo habrá tenido en cuenta.
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.