Plantas fotovoltaicas y biodiversidad, una convivencia «muy aprovechable» para el planeta

La agrovoltaica, una actividad cada vez con más presencia en España y que combina sinergias entre el sector agrícola y el energético, ya ha dado setas y hongos en algunas plantas y miel… solar en otras. Pero si «no se realizan actividades de alto impacto pueden constituir áreas de refugio y alimentación para numerosas especies de fauna y flora silvestre como se ha detectado», afirma Ortega.

Esta es una de las conclusiones a las que ha llegado este biólogo y su equipo de trabajo tras instalar varios dispositivos de fototrampeo que captan imágenes al detectar el movimiento de animales o insectos. Tras dos años de funcionamiento, la planta de Campo Arañuelo III de Iberdrola en Cáceres y con una capacidad de 40 MW de potencia ha vuelto a recibir visitantes. «Hemos registrado más de 10 especies diferentes de mamíferos y hasta 64 pequeñas aves», señala la investigación, lo que supone «un entorno favorable para la fauna autóctona», afirma Ortega.

En concreto, el archivo recopilado de imágenes y vídeos documenta cerca de 9.000 avistamientos y confirma la presencia de mamíferos como el ciervo, conejo, garduña, gineta, jabalí, liebre, meloncillo, ratón de campo, tejón y zorro, a lo que se suman diferentes especies de aves como el jilguero, el avión común, el carbonero, el águila culebrera, tórtola, perdiz, mirlo o zorzal, entre otras. «En tan solo un año ya se pueden percibir mejoras considerables y un paulatino incremento de la biodiversidad existente, hasta el punto de que numerosas especies usan las instalaciones fotovoltaicas como una parte más de sus territorios de campeo y alimentación e incluso como área de reproducción», detalla el biólogo del EMAT.

Otra de las conclusiones a las que llega el informe es que la planta ha permitido «transformar un entorno previamente desfavorable» causado por antiguas áreas de acopio y zonas degradadas por la construcción de la autovía, en un espacio tranquilo y altamente aprovechable para la fauna silvestre.

El estudio de campo ha sido encargado por Iberdrola y realizado por la empresa Estudios Medioambientales y Territoriales (EMAT), en el periodo comprendido entre mayo y octubre de 2023, a través de la técnica de fototrampeo, especializada en el seguimiento de mamíferos terrestres de mediano y gran tamaño. Se han empleado un total de 8 cámaras dotadas de sensores que se activan por el movimiento y que registran imágenes de todos los individuos que entran en el campo de acción de los sensores. Éstas se han situado tanto en el interior como en el exterior de la instalación fotovoltaica, para comprobar si existen diferencias entre ambas zonas.