El Bento Japonés, el equilibrio perfecto entre la sutileza y la exquisitez

Hace un tiempo se lo contábamos en esta misma sección, en una entrevista a Teresa Moon, chef y propietaria, junto con su marido Rohit de este restaurante japonés del que tanto se escucha hablar y del que todo lo que suena es extraordinariamente bueno.

La primera recomendación es la reserva previa. Si bien el local hace sentirse a uno como en un auténtico salón de una acogedora y confortable casa japonesa, ellos siempre lo tuvieron claro, «un local pequeño pero suficiente». Adecuado a las necesidades de la fabulosa cocina de Teresa, adecuado también a la hospitalidad de Rohit, única e inolvidable.

Salta a la vista la evidencia, el producto se expresa por sí solo a través de la vista y del gusto, en una explosión de frescor, desde el pescado, hasta la carne, pasando por el marisco y cualquier vegetal u hortaliza que conlleven las elaboraciones de Teresa.

Lo mejor entonces, será dejarse llevar por su menú «omakase» una expresión que viene a significar «lo dejo en ti» y eso es lo mejor que puede hacer el comensal cuando se adentra en El Bento. Dejarse llevar, básicamente por el producto de temporada, porque ese precisamente será el único que tenga cabida en la cocina.

La variedad de sushi o de sashimi vendrá determinada también por el producto, así que en El Bento podrán encontrar estos famosos bocados elaborados con pescados como el jurel o la sama roquera, solo cercano a nuestras costas. Los más populares, en estos casos, como el atún rojo y toro o el salmón, habrán pasado previamente un estricto control de calidad y eso se percibe en la sutileza que desprenden, estimulando al paladar.

Pero tanto la carta como el menú, también se adecuan a las estaciones del año, así en los meses más fríos, el magnífico estofado de Teresa formará parte del repertorio, la sopa miso que si la encontrarán de manera permanente, es otro de los platos que nadie debería perderse. Y cuando toquen días cálidos, no deje de probar las ensaladas, llenas de creatividad y contrastes y el tartar que le propongan del día, ambos platos absolutamente indispensables.

Y, aunque no le parezca lo propio, no deje de probar la sabrosa versión de hamburguesas de El Bento.

Desde cualquier ángulo del local podrá observar la perfecta sincronía de Teresa y su equipo en cocina. Movimientos sutiles que invitan a la calma como aperitivo y, al otro lado, no pierda de vista los recuerdos que van atesorando y que marcan los pasos de todos esos caminos que anduvieron hasta llegar a lo que hoy pueden ofrecer al público canario.

A sus espaldas casi cuatro años de aforos completos, prácticamente a diario y nada de lo sucedido hasta hoy ha sido cuestión de suerte.

Exigente formación, auto exigencia sin límites, trabajo, perseverancia, sacrificio y tener muy claro lo que el comensal merece que le ofrezcan. Y solo así, es como han llegado a ser uno de los mejores restaurantes japoneses de Gran Canaria que sin duda, hay que visitar tan pronto como se consiga reserva porque, Teresa y Rohit consiguen que se viva una experiencia de las que no se olvidan.

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